Gipuzkoa reclama al Gobierno Vasco un nuevo calendario de aportaciones consensuado con las haciendas forales
Las tres diputaciones se vieron obligadas a pedir el mes pasado al ejecutivo vasco un aplazamiento de pago de 750 millones, de los que 450 correspondían a Gipuzkoa
La Diputación de Gipuzkoa ha pedido al Gobierno Vasco un nuevo calendario de aportaciones consensuado con las haciendas forales para evitar tensiones en las tesorerías. Las tres diputaciones tuvieron que pedir el mes pasado al ejecutivo un aplazamiento del pago de 750 millones de euros, la mayoría, 450 milllones, solicitados por la hacienda guipuzcoana que hoy insiste en que no tiene problemas de tesorería, pero que habría que pensar mejor cuándo se paga al gobierno porque hay momentos especialmente complicados
La diputación de Gipuzkoa quiere que se coordinen mejor los pagos que las haciendas forales tienen que hacer al Gobierno Vasco. Ayer les contamos como las tres diputaciones tuvieron que pedir en abril al gobierno vasco un aplazamiento de sus pagos de 750 millones de euros. De éstos, más de la mitad, 450 millones, correspondían a la diputación guipuzcoana. Hoy nos dicen que no fue por problemas de tesorería, sino por desfases de pagos e ingresos en parte motivados por la campaña de la renta.
Coincidencia con la campaña de la renta
Ha coincidido el mes de abril con el inicio de la campaña de la renta en la que Gipuzkoa ha tenido que devolver de golpe a los contribuyentes 150 millones de euros. Esa es una de las razones por las que la diputación no pudo hacer frente a esa devolución al Gobierno Vasco el mes pasado. Para la directora foral de presupuestos, Maider Otamendi, su prioridad está en devolver el dinero a los contribuyentes.
Encaje de bolillos
La responsable foral reconoce así que han tenido que hacer encaje de bolillos, aunque aclara que tres días después de solicitado el aplzamiento ya pudieron pagar la mitad de lo aplazado, que otra parte se ha ingresado esta semana y que el resto será abonado en dos semanas.
Quieren así negar que haya problemas de liquidez, y atribuyen la solicitud de aplzamiento a una situación puntual y circunstancial, a la vez que insisten en esa necesidad de cambiar el calendario para que las diferentes arcas forales puedan hacer frente a los pagos sin pasar estrecheces.




