Vivir de la chatarra
33.000 personas en Cataluña se dedican exclusivamente a recoger restos de cobre, hierro y aluminio por las calles
(ANNA PUNSÍ)
Son los resultados de un estudio encargado por el Gremio de Recuperación de Residuos que quería saber qué pasaría si la administración regulara este trabajo y la conclusión es que los 33.000 afectados tendrían que dejarlo porque perderían dinero
El director del estudio y secretario técnico del Gremio, Jordi Costa explica que es un trabajo que les ayuda a sobrevivir y que si tuvieran que pagar la cuota de autónomos a los condenaría a sufrir pobreza severa: "resulta que la mayoría pasa de pobreza a pobreza serbal o directamente les da un resultado negativo, de modo que o limitamos absolutamente sus recursos o no les sale viable la actividad porque tendrían que pagar más cuota que lo que ingresan"
Las 33.000 personas que se dedican a recoger chatarra lo hacen 4 días y medio a la semana y cobran de media 8 euros con 60 céntimos la hora.
Los horarios son extenuantes. Hay mucha competencia y menos chatarra para repartir.
Según este informe, que ha elaborado la consultoría Datambient, estas personas recuperan un 22 por ciento de los residuos metálicos que gestionan los centros de recogida, es decir, 125.000 toneladas.
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