Mikel Landa finaliza en el puesto 34 del Giro de Italia

Mikel Landa termina a 1 hora 23 minutos y 6 segundos del ganador. A pesar de sufrir un par de caidas en la primera semana, el de Astana se repuso y fue cogiendo la forma durante la carrera. Se le vio, por ejemplo, el día del Gavia y el Stelvio ayudando a su entonces jefe de filas, el sardo Aru. En la subida al Zoncolán también se comportó a un gran nivel y entró a un cuarto de hora del ganador, Michael Rogers.

Estamos ante la primera temporada de Landa en el equipo kazajo. Aunque, inicialmente, no se tenían certezas acerca de su rendimiento, entre Martinelli y Vinokourov cerraron el compromiso. Ya en el Giro de Trentino, el corredor de Murgia demostró su categoría ganando una etapa y tapando bocas.

La primera semana del Giro estuvo caracterizada por las caidas y Landa se fue al suelo en la etapa que terminaba en Dublín y en la que concluía en Viggiano. Al final, chapa y pintura y a montarse en la bicicleta el día siguiente haciendo de tripas corazón. El joven corredor alavés señala también la llegada a Bari como una de las jornadas más complicadas de la carrera rosa. Aquello fue una pista de patinaje.

A medida que se acercaban los Alpes y los Dolomitas, el zuyano ha ido cogiendo protagonismo y ha conseguido convencer a sus jefes del fichaje realizado. De hecho, ha ayudado mucho a Aru para conseguir la tercera plaza en el cajón de Trieste. Landa ha terminado como primer vasco del Giro y tan sólo Herrada y Samu Sánchez han sido los españoles que le han precedido en la Clasificación General. Ahora espera noticias sobre su calendario de cara a la segunda parte de la temporada.