Un agujero en las cuentas pone en jaque a Intersindical Canaria
Las Palmas de Gran Canaria
Transferencias a cuentas de afiliados, amigos y familiares, préstamos personales, fines de semana en casas rurales y hasta amortizaciones de crédito hipotecarios. La sectorial de Salud de Intersindical Canaria en Gran Canaria ha tenido un agujero durante los últimos años que nadie de la cúpula del sindicato detectó hasta que varios miembros de la organización cuestionaron transferencias que no tenían justificación alguna. El juzgado número 2 de Las Palmas investiga, tras una denuncia interpuesta por miembros del sindicato, estas transferencia y gasto de dinero procedente de las cuotas de los afiliados que se hizo sin justificación.
Las transferencias se realizaban desde la cuenta de la sectorial de Salud hasta otra cuenta corriente a nombre de Sindicato Canario de la Salud (SCS), para ya desde ahí operar sin control. El SCS fue uno de los sindicatos que se fusionaron en 1994 para crear Intersindical Canaria. Desde el inicio, como el resto de organizaciones sindicales que participaron en la unión, tenían el mandato de cerrar la cuenta corriente, pero esta se mantuvo abierta y con una actividad importante, al menos en los últimos cuatro años, según los datos que obran en manos de la investigación.
Una auditoría solicitada por el propio sindicato, después de la insistencia de varios miembros de la directiva, reveló que efectivamente faltaba dinero en los últimos años en la sectorial de Salud de Gran Canaria y se ordenó inmediatamente la apertura de un expediente de expulsión al tesorero que había estado a cargo de esa cuenta. Se referían a Juan Jesús Galván, que ya se había dado de baja del sindicato un año antes de que la dirección del mismo tomara medidas. En el mismo documento interno también se invitaba a los afiliados que estaban cuestionando la transparencia de las cuentas que abandonaran las acciones judiciales, hecho, que, según la abundante documentación que obra en manos de los juzgados, parece no haberse hecho.
