El arsenal encontrado en el caserío de Muskiz asciende a 500 artefactos explosivos
Según informa a la SER el departamento de Seguridad, es la cantidad descubierta en la vivienda en la que guardaba los explosivos el hombre que sufrió la amputación parcial de una pierna cuando manipulaba un obús
La incautación del armamento en la vivienda donde un hombre sufrió la amputación parcial de una pierna cuando manipulaba un obús / ERTZAINTZA
Alfredo Irusta se puede a enfrentar a ocho o diez años de prisión máxima. Así lo recoge el código penal: de cuatro a ocho por tenencia ilicita de explosivos y de cinco a diez si se consideran armas de guerra. Eso corresponderá al juez de Barakaldo que instruya el caso, valorarlo, porque las diligencias ya están abiertas una vez que el Departamento de Seguridad nos ha confirmado que ha trasladado el atestado con ese posible delito a investigar y que la Fiscalía se ha personado en el caso
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La afición al material bélico, fundamentalmente de la Guerra Civil, le ha costado cara a Alfredo Irusta, un vecino de Muskiz de 46 años. Al parecer es aficionado a rastrear este tipo de restos que quedaron enterrados en los montes y coleccionarlos. El fin de semana se supo de esa afición después de que le estallara un obús que manipulaba en su casa. Él fue trasladado al Hospital de Cruces, donde se encuentra ingresado, y donde le han tenido que amputar parcialmente la pierna.
Lo novedoso del caso es que, tras producirse la explosión, la Ertzaintza acordonó la zona y comenzó la investigación ocular a cargo de efectivos de la Brigada Móvil y del equipo de artificieros. Han permanecido allí dos días y el resultado ha sido la localización de medio millar de artefactos explosivos en la vivienda. Concretamente, según ha informado la Ertzaintza, 345 proyectiles de artillería, cien de mortero, cuarenta granadas de mano, cinco bombas de aviación, seis proyectiles antiaéreos y varias espoletas.
Según hemos podido saber, el herido es Alfredo Irusta (46 años), conocido en el municipio por su afición a la historia y en concreto a la Guerra Civil. De hecho, en el año 2006 realizó un vídeo-reportaje de 12 minutos de duración en el que se mostraban diferentes imágenes relacionadas con el alzamiento franquista del año 36 y sus consecuencias en la Guerra Civil. Centró esos acontecimiedntos en el municipio bizkaino, donde reside, concretamente en el barrio de La Cadena, en un caserio próximo a la carretera nacional que comunica con Cantabria. Familiares del herido, consultados por la SER, confirman que hace unos años entrevistó a antepasados suyos interesándose por este tipo de hechos históricos. Vecinos de la localidad afirman desconocer su afición a coleccionar este tipo de artefactos, aunque conocían su interés por la historia. Recientemente, este vecino de Muskiz hizo entrega de unos restos óseos a la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Restos que dijo haber encontrado de forma fortuita. Este hallazgo se produjo en el monte Saibigain.
