Imputan al alcalde de Cullera por el incendio originado por unos fuegos artificiales
La Fiscalía le imputa un delito de incendio forestal por imprudencia grave

(CADENA SER)

Valencia
El incendio calcinó la montaña de San Antonio en Cullera, a finales de abril. El alcalde y el concejal de fiestas están imputados por permitir el disparo de fuegos artificiales a pesar de que estaba decretada la máxima alerta por riesgo de incendios. Ernesto Sanjuán, del PP, declarará el 14 de julio.
El alcalde de Cullera, Ernesto Sanjuán, tendrá que declarar como imputado el próximo 14 de julio por el incendio declarado en esta localidad valenciana el pasado 26 de abril durante un espectáculo pirotécnico disparado pese a estar en alerta máxima por riesgos de incendios forestales.
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Según informa el Tribunal Superior de Justicia valenciano, junto a Sanjuán (PP) declarará también como imputado el concejal de Fiestas, Andreu Piqueras, ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Sueca, encargado del caso
En la providencia se cita como testigos a cuatro agentes de la Guardia Civil de Cullera, que tendrán que declarar el 11 de julio, y a otras personas también en calidad de testigos para dos días antes.
La Fiscalía pidió la imputación para el alcalde y el concejal de Fiestas por la supuesta responsabilidad de un delito de incendio forestal por imprudencia grave previsto en el artículo 358 del Código Penal.
El portavoz de Compromís, Enric Morera, presentó el pasado 2 de mayo una denuncia por la conducta del alcalde y la junta de gobierno local al autorizar el disparo de fuegos artificiales a pesar de la prohibición de cualquier espectáculo pirotécnico en terreno forestal o en una franja de 500 metros alrededor.
La Fiscalía pidió que declarara como testigo Javier Navarrete Ruiz, del Centro de Coordinación de Emergencias, los agentes de la Guardia Civil y la Policía Local que participaron en el desalojo y las personas afectadas por éste.
El grupo operativo de investigación de incendios forestales dependiente de la Conselleria de Gobernación y Justicia emitió un informe preliminar sobre las causas del incendio, que afectó a 3,2 hectáreas de montaña -matorral y pinos blancos- y en el que se detectaron al menos seis puntos de inicio, todos ellos en la montaña propiedad del Ayuntamiento de Cullera.
En ese informe se indica que la actividad de lanzar el castillo pirotécnico "no era autorizable", que se había declarado para ese día el nivel 3 de preemergencia por riesgo extremo de incendios forestales, remitida por fax al Ayuntamiento y comunicada vía mensaje de móvil por el Centro de Emergencias.
Añade que varias personas del barrio de Sant Antoni tuvieron que abandonar sus viviendas y recuerda que en el mismo lugar y por el lanzamiento de castillos "de similares características" se han producido otros incendios en los años 2010, 2011 y 2013 de menor extensión y consecuencias.
Según el atestado de la Guardia Civil, durante el tiempo que duró el castillo se vio cómo se iba prendiendo matorral por la caída de cohetes aún encendidos pero no se pudo acceder por el peligro de que cayeran sobre el personal de extinción.




