Restaurante Castillo

VALENCIA

Ser Viajeros se emitió el pasado sábado desde esta población que acaba de celebrar con éxito el II Festival Internacional de Jazz de Godella. Y el Pequeño Templo del Buen Comer dedicó sus minutos gastronómicos a este restaurante de cocina tradicional

Eduardo Frechina lo tiene claro: "elegir producto de temporada y cocinar sin prisas, siempre a fuego lento, como lo hacían nuestras madres". Cocina valenciana con un toque de autor, y en este caso además la tradición le llega también desde la repostería porque su familia tiene una pastelería en Godella desde hace más de cien años.

Si hay un plato típico que se cocina en esta población de l' Horta Nord es el arròs amb fesols y naps. Tal y como nos contó el chef en el programa, que se emitió desde Villa Eugenia, "en verano se hace cola a 35 grados para conseguir en fiestas un plato de este suculento arroz". En el restaurante Castillo está en carta y se puede pedir por encargo, igual que las paellas, que se llevan también a domicilio.

Como entrante, uno de los platos que le gusta recomendar es el atún marinado: "hay que salpimentar el atún, y rallar la coliflor para que quede con la consistencia de un cous, cous, con un poquito de sésamo". Un plato de temporada delicioso. De segundo nos ofreció unas carrilleras, cocinadas con verduras de temporada, y hierbas aromáticas, a las que se puede añadir un poco de Oporto o vino tinto. Y de postre, y haciendo honor a su amigo Ricardo Caballer, también de Godella y presente en el programa, una infusión de chocolate y nata, que se prepara con bolitas con pasta filo, una especie de croquetas líquidas que, tras pasar por el horno, explotan en la boca con todo su sabor. Un pequeño Templo del Buen Comer a tener muy en cuenta en esta localidad que nos sorprendió por su casa Museo de Pinazo, su Festival de Jazz y por ser pionera en la organización de un mercado agrícola de venta directa.