Caso Espías: El exconsejero Granados llamado a declarar como testigo en septiembre

La investigación judicial entra ya en su quinto año de instrucción con 6 imputados por un delito de malversación de fondos públicos

El que fuera consejero de justicia e interior acude al juzgado número cinco de Plaza de Castilla en calidad de testigo para aclarar una serie de reuniones en las que varios de los imputados, ex guardias civiles y trabajadores de la consejería, le relataron que eran obligados a realizar seguimientos a Alfredo Prada y Manuel Cobo, entonces cargos muy importantes en el PP madrileño.

En esas reuniones, Granados siempre les manifestó que debían negarse a practicar esos seguimientos que presuntamente eran ordenados por el director general de seguridad, el policía y persona muy cercana a Aguirre, Sergio Gamón.

En definitiva, que presuntamente existía un grupo de altos cargos que dirigía esos espionajes con independencia de quien fuera en ese momento el consejero de justicia.

A la luz de los interrogatorios ya realizados en sede judicial, la línea de investigación se centra en determinar quién o quienes dirigían a ese grupo de espías. De espías de tebeo porque los seguimientos, los informes realizados sobre Prada y Cobo o el uso sistemático de móviles corporativos que dejan huella podrían pasar a formar parte de la historia de la chapuza.

De cualquier modo, cinco años después de conocerse el escándalo, nadie ha asumido todavía las responsabilidades políticas. Una exigencia que los socialistas madrileños siempre han puesto sobre la mesa.

Por su parte, Ignacio Gonzalez, el presidente madrileño ha eludido hacer comentarios sobre este asunto.

Tanto Granados como su entorno consideran positivo pasar por el juzgado para confirmar estos extremos. El ex-consejero de Justicia lleva ya muchos meses fuera de la política activa y ha regresado a su trabajo en un banco de inversiones.

Este interrogatorio se produce por la petición de otra de las víctimas de esos seguimientos Carmen Rodriguez Flores, ahora diputada nacional, y una persona muy próxima al que fuera tesorero del PP Álvaro Lapuerta, imputado en el caso Bárcenas