Las palmeras de Valencia se han caido por no estar podadas a tiempo
Según la Asociación de Palmereros de Elche, esta es la causa de los desplomes de las tres últimas palmeras en Valencia. El Ayuntamiento ha creado varios grupos de trabajo que las están revisando
Valencia
Esta última semana el Consistorio ha tenido que talar por prevención una palmera en la Alameda, a la altura del quiosco La Pérgola, por su alto grado de inclinación. El ejemplar era uno de los más viejos de la zona y estaba en medio de la calzada. El pasado jueves otra palmera tuvo que ser aligerada en la Plaza de la Reina por riesgo de caida
Hasta ahora han sido tres las palmeras que han caido en la ciudad. En los últimos días, la primera se desplomó en la Gran Vía Germanías y provocó heridas leves a una mujer, otra lo hizo en plena plaza del Ayuntamiento, esquina con Periodista Azzati, y una tercera cayó sobre un vehículo en el barrio del Cabanyal.
Según Miguel Ángel Sánchez, presidente de la Asociación de Palmereros de Elche, una de las causas de los desplomes es que las palmeras no están podadas a tiempo. Recuerda que en Alicante ocurrió lo mismo el pasado año, varias palmeras datileras se desplomaron al cargar con más de 200 kilos. No cree Sánchez que el golpe de calor haya sido el causante de la caida, pero reconoce que si la palmera no está bien regada, pierde elasticidad y se puede partir con mayor facilidad.
La recomendación de la asociación es que las palmeras se han de podar entre los meses de abril a junio, sobre todo las hembras, porque al cargar más dátiles tienen mayor peligro de caida. Además recalca que las palmeras se deben revisar porque las que han sido trasplantadas pueden tener alguna irregularidad en el tronco. Sería fundamental, según Sánchez, que hubiera una revisión anual del estado de los troncos para evitar males mayores.
En cuanto al picudo rojo, los palmereros indican que la plaga va a más. Es un problema muy serio porque la gran mayoría de las palmeras están en la vía pública y pueden representar un peligro. Pero teniendo profesionales que las traten, las controle y revise y las pode cuando lo necesiten, los riesgos de caida, según la asociación de palmereros, se minimizan.




