Lakua defiende la posibilidad de suprimir empleos y bajar jornada y sueldo a los funcionarios

El gobierno vasco y los sindicatos se reunirán mañana para discutir el anteproyecto de ley de empleo público que permitirá reducir sueldos y salarios a los funcionarios y que los sindicatos rechazan al considerarla una aplicación de la reforma laboral al funcionariado.

El viceconsejero de función pública del gobierno vasco, Andres Zearreta ha calificado de exageradas las críticas sindicales al anteproyecto de ley de empleo público vasco que prepara y cree que ya es hora de actualizar una normativa que tiene 25 años de antigüedad, por que han cambiado muchas cosas desde entonces, tanto en la tecnología que tienen a su disposición los trabajadores como en sus propias funciones. El borrador que presentará mañana a los sindicatos incluye entre otras medidas la posibilidad de reducir horarios y salarios a los funcionarios en tiempos de crisis, por ejemplo, mediante excedencias forzosas. Zearreta afirma que esto no sería posible en la situación actual porque ya estamos saliendo de la crisis, pero es necesario disponer de esta herramienta para tener una vía de salida si en un futuro fuera necesario. Pone además de manifiesto que no se están planteando las medidas más agresivas posibles, como serían los despidos. El viceconsejero espera que sería positivo alcanzar un acuerdo con los sindicatos, pero recuerda que las leyes las aprueba el parlamento vasco.

El borrador de texto legal, que ayer martes presentó el Gobierno vasco y desde hoy somete a información pública, regula la supresión de puestos de trabajo que, según los sindicatos, habilita la posibilidad de despedir a personal laboral, aunque no afectaría a los funcionarios, a lo que la ley obliga a reubicar.

El anteproyecto reserva además la posibilidad de forzar "excedencias", "fijar periodos de inactividad", "reordenar el tiempo de trabajo" o "reducir jornada y retribuciones", cuando una situación de crisis, contención presupuestaria o reducción de los ingresos, "imposibilite el mantenimiento de las plantillas".

Igor Izaguirre de ELA ha lamentado que se "calque" lo que hace Madrid y ha advertido de que "no vamos a aceptar que se aplique la reforma laboral en la Administración, es una raya roja ".

Según Mari Cruz Vicente de CCOO "son un ataque inadmisible y esos artículos se tienen que retirar del anteproyecto y plantear auténtico proceso negociación".

Ni siquiera contenta a los sindicatos que el texto regule la carrera profesional para funcionarios y personal laboral. "Lo poco que mejora esta ley no lo asegura, tan solo da la posibilidad a cada administración de hacerlo o no hacerlo", asegura Arantxa Agote de UGT.

El Gobierno vasco tiene ya por tanto el no por anticipado de los sindicatos, con los que se verá las caras este jueves a las 11 de la mañana en su sede de Lakua en Vitoria.