Investigan al jefe de seguridad del president por interrogar irregularmente en comisaría a un asesor del vicepresident

Los hechos ocurrieron en julio pasado. El jefe de prensa del vicepresident del Consell, que levantó acta notarial del interrogatorio, prestó declaración durante tres horas ante el jefe de seguridad del Palau de la Generalitat en relación con varias filtraciones a la prensa. Interrogatorio realizado sin que haya registro del mismo y sin el conocimiento del máximo responsable de la Policía Autonómica que ahora investiga los hechos

El objetivo del interrogatorio a Juan Botella era intentar identificar al "topo" que habría filtrado información relativa a presidencia de la Generalitat. En concreto el número dos de la Policía Autonómica y Jefe de Seguridad del Palau de la Generalitat, Rafael Piqueras, insistió en las relaciones de Botella con periodistas y le habría presionado para que señalara al propio José Císcar, vicepresident del ejecutivo de Alberto Fabra. El interrogatorio se realizó en la sede central de la Policía Autonómica, duró tres horas y del mismo no quedó constancia ni registro, aunque el interrogado levantó acta notarial en previsión de lo que pudiera ocurrir.

Recordamos que el supuesto topo filtró información relativa a la contratación de un "coach" o profesor de liderazgo para el president Fabra; la nómina del jefe del Consell y hojas de gastos realizados por la secretaria autonómica de organización. Los hechos acabaron en fiscalía que archivó la investigación y también merecieron explicaciones del vicepresident, José Císcar, en Les Corts. Por eso, ese interrogatorio posterior sería especialmente grave.

REACCIONES

El Conseller de Gobernación, Luis Santamaría, en declaraciones a la Ser, ha pedido prudencia y se ha comprometido a hacer públicos los resultados del expediente informativo de carácter reservado que el pasado día 6 ordenó abrir al Jefe de la Unidad Adscrita de la Policía Nacional, al jefe de la Policía Autonómica.

Santamaría defiende a la Policía Autonómica, "está fuera de toda duda y goza de un prestigio merecido" y añade que "estamos analizando una situación puntual". Niega al tiempo que existiera ninguna orden previa de investigar las filtraciones para localizar a ningún topo. Hay que subrayar que el interrogatorio se produjo en comisaría y sin que, a tenor de lo expuesto por el conseller de gobernación, existiera investigación ni razón legal alguna para actuar de esa manera.

Por su parte, el vicepresident Císcar aseguró ayer que le parecería "ridículo" que se investigara a sus colaboradores máxime cuando ya hubo una investigación interna que demostró que ninguno de ellos tenía nada que ver con las filtraciones.

Y desde la oposición, Mónica Oltra, diputada de Compromís ha sido más gráfica: "no sé si el gobierno de Fabra ha decidido hacer el guión de Torrente 6 a Santiago Segura". Oltra se muestra "estupefacta" y se pregunta si la policía no tiene otra cosa que hacer que investigar las batallas internas del PP valenciano sometiendo a funcionarios al "tercer grado".

Ignacio Blanco de Esquerra Unida califica lo ocurrido de "surrealista y realmente preocupante" y pone el acento en la debilidad del president, al que llama "pelele" al que no respetan siquiera ni sus más íntimos colaboradores.