100.000 euros por organizar una Oferta Pública de Empleo de hasta 4.000 aspirantes

Tras dos años de sequía, 2015 apunta como el año de las OPEs, cuando está prevista la convocatoria de casi medio millar de plazas para Salud, otra convocatoria para Educación y 80 plazas correspondientes a encuestadores del Eustat (hay otra convocatoria pendiente en Lanbide, que afecta a 180 orientadores laborales, pero la OPE está pendiente de que se apruebe la RPT, que aún negocian Gobierno y sindicatos). Si en cada una de estas citas se llegara a los 4.000 aspirantes, el saldo de estas tres convocatorias llegaría a los 300.000 euros aproximadamente.

Y es que, según las cifras facilitadas por el Instituto Vasco de Administración Pública, el desglosado de costes en función del número de aspirantes nos lleva a esa cantidad. Lo más costoso es el alquiler de aulas. Si los aspirantes no llegan a 150, el coste es 150 euros, pero si, como suele ser habitual, se llega a los 4.000, el coste de los espacios preparados suele rondar los 75.000 y exclusivamente se celebra en el BEC.

A partir de aquí, y partiendo de esa cifra de aspirantes, al tribunal se le abona, normalmente, 10 euros la hora y suelen estar cinco personas (lo que nos daría un total de 1.000 euros). Para los "bedeles" de la prueba, el precio es el mismo, pero contando 30 personas (lo que sumaría un total de 6.000 euros). El coste de la empresa de seguridad que guardia y custodia el examen "incluyendo nocturnidad si es preciso", como nos aseguraba Fulgencio Aledo, subdirector de selección y formación del IVAP, suele rondar los 5.000 euros. Si el examen es tipo test (y con un número amplio de aspirantes suele hacerse para que la corrección y los primeros resultados se conozcan en cuatro horas como máximo) el coste ronda los 1.200 euros. Si es un examen de desarrollo, 500 euros. La publicidad de la convocatoria en periódicos suele sumar 12.000 euros. A esto habría que sumar otros posibles costes internos (como la compensación a trabajadores por horas extras, las correcciones añadidas en pruebas de idiomas y el acuerdo con otros servicios ajenos como son las ambulancias de Osakidetza, la regulación específica del tráfico o el incremento de autobuses o metro).

De acuerdo a esos 100.000 euros como cifra aproximada de coste de una Oferta Pública de Empleo con hasta 4.000 aspirantes habría que añadir que por persona sería un total de 33 euros. Precio, por cierto, que no llega al ingreso que esa OPE supone para la Administración ya que quienes se presentan abonan también unas tasas que van desde los 7 a los 21 euros como cifra máxima, según el IVAP.

IVAP que, por cierto, tiene en el "congelador", como nos detalla Fulgencio Aledo, una propuesta para cuando el Gobierno Central levante totalmente la limitación de plazas para las Ofertas Públicas de Empleo y puedan comenzar a darse "como un goteo" plazas ofertadas en diversos ayuntamientos. "Plazas sueltas cuya convocatoria para ocuparlas supone un coste importante para consistorios pequeños, de forma que desde el IVAP se propondría convocatorias unitarias para racionalizar el gasto". Según Aledo, aún falta tiempo para eso.