Alaya niega el permiso a Faisem para que denuncie a Teodoro Montes
La magistrada pide auxilio a la Inspección de Trabajo para investigar la macrocausa de los cursos de formación
Sevilla
La Fundación pública Andaluza para la Integración de personas con Enfermedad Mental, Faisem, no tiene licencia de la jueza, Mercedes Alaya, para querellarse contra el testigo protegido Teodoro Montes, el que dijo que Faisem medicó a un grupo de alumnos que recibían un curso de formación en Sevilla, en el mes de julio, en una nave acristalada a más de 50 grados. Así que Faisem, que solicító el testimonio de Montes en el juzgado para actuar contra él, no tendrá copia de lo dicho por este hombre y sólo podrá irse al juzgado de guardia, si quiere, con recortes de prensa.
Alaya en un auto le dice a Faisem que la querella, acompañada de la declaración judicial del testigo, sólo podría presentarse cuando se archive el caso de los cursos de formación o cuando haya una sentencia absolutoria.
La magistrada, por otro lado, ha pedido auxilio a la Inspección de Trabajo para investigar los cursos de formación.
La Inspección fue la que hizo referencia en un informe a los "graves perjuicios" que se causó a la Seguridad Social, al presupuesto de empleo estatal y al de la Junta de Andalucía con las ayudas de 105 millones de euros que la administración andaluza concedió a Delphi.
Con esas ayudas, en las que participaron las empresas de formación del exconsejero andaluz Ángel Ojeda, imputado en el caso, se produjeron contratos simulados, entre otras irregularidades, señalaba el informe.
CCOO también anunció una querella contra Montes por acusarle de pedir comisiones ilegales del 20 % para subcontratar cursos, aunque antes de esa denuncia ha solicitado un acto de conciliación con el funcionario y ha evitado pedir licencia a la juez.