Un protocolo mejorará la detección de casos de protección infantil
En 2014, la Diputación ha recibido 313 nuevas notificaciones de situaciones de desprotección infantil

Guillermo Viñegra, viceconsejero de Sanidad, Ander Rodríguez, diputado de Política social, y Jon Etxeberria, director general de Osakidetza / Adriana Portugal

San Sebastián
Mejorar la detección de casos de desprotección infantil en el ámbito sanitario, así como la coordinación entre el personal del Servicio Vasco de Salud y los Servicios Sociales de la Diputación de Gipuzkoa es el objetivo de un protocolo suscrito hoy entre ambas instituciones en San Sebastián. El objetivo es sistematizar la colaboración entre el personal sanitario y el de los servicios sociales para intervenir ante sospechas de maltrato o situaciones de desatención hacia los niños por parte de sus familias.
Osakidetza está detrás de un número importante de notificaciones que reciben tanto los servicios sociales municipales como los forales, pero se trata de regular esta colaboración para casos en los que, por ejemplo, una madre manifiesta en un servicio de salud que desea entregar a su hijo de adopción o es necesario ejecutar una medida legal de separación cuando un menor se encuentra ingresado en un hospital. El documento recoge cómo y a quién deben dirigirse los profesionales para potenciar el intercambio de información y en qué plazos de tiempo deben hacerlo con el fin de extremar el control para detectar posibles casos de maltrato.
La Diputación de Gipuzkoa ha facilitado datos del número de menores atendidos en este territorio en 2014, cuando la institución foral recibió 313 nuevas notificaciones de situaciones de desprotección infantil y se adoptaron 195 medidas de protección. En estos momentos, hay 627 menores tutelados, de los cuales 333 se encuentran en acogimiento familiar y 294 en residencial en Gipuzkoa, donde también se llevaron a cabo intervenciones en el propio entorno familiar, en concreto, en la atención de 705 menores. Ander Rodríguez, diputado de Política Social, ha explicado que el número de notificaciones de posibles casos de desprotección infantil aumenta anualmente como consecuencia de una mayor capacidad de detección de situaciones sospechosas.




