El debut soñado de Ibon Navarro
Laboral Kutxa vence en el derbi vasco ante Gipuzkoa Basket (79-62) gracias a una mejorada defensa en la segunda parte
Ibon Navarro da instrucciones al frente del banquillo de Baskonia / Foto ACB.COM
Vitoria
Sonó el nombre de Ibon Navarro en la megafonía del Buesa Arena y el público respondió con todo el calor al técnico vitoriano, ante su debut como titular del banquillo baskonista. Sirva el dato como simple anécdota: el último entrenador vitoriano en el Baskonia fue Iñaki Iriarte hace 22 años, sustituyendo al destituido Herb Brown.
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Aplausos en el Buesa Arena a Ibon Navarro en su debut como entrenador de Laboral Kutxa
La victoria era tan necesaria en el bando alavés como guipuzcoano, por eso el derbi vasco auguraba un partido de disputa.
En el quinteto titular vitoriano, San Emeterio y Causeur asumían responsabilidades. Un inicio tibio vitoriano, con nervios y ocho pérdidas permitió que Hanley y Doblas camparan a sus anchas. Causeur, motivado por la confianza tiró de los locales que, atascados en ataque, recibieron un parcial de 0-8 para irse por debajo en el marcador en el primer cuarto (15-20).
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Ponsarnau: 'El partido se nos ha ido en el tercer cuarto'
Navarro rotó el banquillo buscando otras soluciones. Un triple de Hamilton abría el segundo período con más acierto vitoriano aunque las pérdidas seguían siendo un lastre. Gipuzkoa Basket no se desarmó y tiró de orden y juego colectivo para mantener el pulso e irse por delante al descanso con Doblas como gran referente con 11 puntos.
El tercer período arrancó con la mala noticia para los de Ponsarnau del esguince de tobillo de su mejor jugador, Hanley, que se unía a la baja de Dani Díez, contratiempos que acusó el equipo guipuzcoano.
Laboral Kutxa subió su intensidad defensiva. Correcto en labores de intendencia y sin experimentos, su defensa individual más agresiva bloqueó a su rival y permitió más alegría en su juego para anotar un parcial de 10-0. Heurtel empezó a enseñar el camino y Shengelia despertó con puntos y acciones de calidad. A los de Ponsarnau les costó anotar su primera canasta 5 minutos, con un triple de Iarochevitch. La diferencia se fue a los diez puntos (55-45) y aumentó a los 16 en el arranque del último período con un Causeur pletórico que sumó los primeros siete puntos.
Se sumó a la fiesta anotadora Bertans con dos triples, aunque el letón funcionó por chispazos puntuales. Vujacic estuvo desaparecido, quizás porque Causeur se reivindicó, tras tener poco protagonismo con Crespi en el banquillo.
El Baskonia no dependió tanto de su juego exterior y buscó alternativas en la pintura con un Iverson trabajador y poderoso bajo los aros (9 rebotes), que volvió a hacer una labor oscura para marcharse como el tercer jugador más valorado del equipo (13) por detrás de Causeur (17) y Heurtel (15).
La tercera victoria de Laboral Kutxa en Liga pasará a la historia como la primera de Ibon Navarro en el banquillo. Los vitorianos no deslumbraron con su juego, sumaron 17 pérdidas y sus males continúan, pero ganar se hace imprescindible para enderezar el rumbo.
