Ricart no volverá a la cárcel
El único condenado por el triple crímen de Alcàsser queda definitivamente libre tras 21 años de cárcel después del rechazo por parte del Tribunal Supremo a los recursos presentados por el Abogado del Estado, la acusación popular y las acusaciones particulares
Valencia
La sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha confirmado la libertad de Miguel Ricart, quien pasó 21 años en la cárcel por el secuestro, violación y asesinato de Miriam, Toñi y Desirée, las tres niñas de Alcàsser (Valencia), que tuvo lugar en noviembre de 1992. El condenado por estos crímenes salió de la prisión a finales del año pasado, tras desactivarse la conocida como 'doctrina Parot', con la que se había alargado su permanencia entre rejas hasta 2023, es decir, cuando hubiera cumplido la máxima pena que contemplaba la ley, de 30 años.
Ricart fue la única persona condenada por el asesinato de Miriam García, Toñi Gómez y Desirée Hernández, las niñas de 14 y 15 años que desaparecieron en noviembre de 1992 y cuyos cuerpos fueron localizados en el paraje deLa Romanael 27 de enero de 1993. El otro considerado autor de este suceso, Antonio Anglés, huyó y figura en paradero desconocido desde entonces.
Ricart, condenado en el año 1997 a 170 años de prisión por el triple crimen, tendría que haber salido del establecimiento penitenciario en 2011, pero un año antes se le decidió aplicar la conocida 'doctrina Parot', con la que se le alargó su permanencia hasta 2023, es decir, cuando hubiera cumplido los 30 años de cárcel.
Sin embargo, con la desactivación de la doctrina por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH),l a Audiencia de Valencia acordó a finales de 2013 la inmediata libertad del condenado, quien en ese momento se encontraba en la prisión de Herrera de La Mancha, al estimar que se habían cumplido las penas impuestas.
Tras esta resolución dela Audiencia, Ricart salió de la cárcel el 29 de noviembre de 2013, tras pasar 21 años entre rejas, y lo hizo con el rostro cubierto por una braga polar y un gorro de color negro, solo mostrando sus ojos. Abandonó la cárcel entre una enorme expectación mediática a través de un taxi que le esperaba en la puerta.
Contra esta decisión de libertad de Ricart, la Abogacía del Estado,la Asociación Clara Campoamor --acusación popular-- y dos acusaciones particulares --padres de dos de las víctimas-- interpusieron recursos de casación ante el TC, en los que pedían el mantenimiento de la 'doctrina Parot'.
Por su parte, el fiscal no se opuso a su puesta en libertad en aplicación a la sentencia europea, al tiempo que consideraba correcta la liquidación de la condena que se aplicó sobre el reo.