Activistas de Greenpeace se enfrentan a dos años y medio de cárcel
Ha comenzado al juicio que sienta en el banquillo a 16 activistas y a un fotoperiodista que entraron en la Central Nuclear de Cofrentes
Valencia
Dieciseis activistas de Greenpeace y un fotoperiodista, se sientan desde este jueves en el banquillo, acusados de provocar desórdenes públicos graves, lesiones en agentes de seguridad y daños en la Central de Cofrentes.
Esos supuestos delitos los cometieron en 2011 cuando la organización ecologista burló la seguridad de la Central Nuclear de Cofrentes, consiguieron entrar para desplegar pancartas y hacer pintadas pidiendo su cierre inmediato.
NO FUERON CONVOCADOS POR GREENPEACE
Los acusados han manifestado en su declaración en el juicio que acudieron a la movilización convocados por sms sin conocer quién la organizaba. Han negado que causaran daños en la planta y que en ningún momento quisieron poner en peligro la central. Sólo fueron a protestar por la ampliación del plazo de explotación.
Algunos de los acusados han asegurado que accedieron al recinto por unos agujeros en la valla, y que entraron muchas más personas que las 17 que se sientan en el banquillo. Afirman que actuaron sin seguir órdenes de nadie y que les fué fácil el acceso al recinto.
Aseguran que había mucha confusión, descontrol absoluto entre los vigilantes y que no hubo enfrentamiento ni agresividad con el personal de seguridad.
PLAN PRECONCEBIDO
La Fiscalía asegura en su escrito que eran socios o simpatizantes de Greenpeace, que actuaron de común acuerdo mediante un plan preconcebido, que llevaban monos de color naranja con la inscripción Greenpeace y que accedieron a la central tras cortar las vallas de seguridad valiéndose de una radial, con la que se produjo un corte uno de los vigilantes de seguridad. También afirma que en el forcejeo con los vigilantes de seguridad golpearon a algunos de éstos.
El fiscal estima que estos hechos son constitutivos de un delito de desórdenes públicos, de dos delitos de lesiones, de un delito de daños y de tres faltas de lesiones. Pide dos años y ocho meses de cárcel para cada uno de los 17 acusados y multas que sumadas entre todos ascienden a 357.000 eruos.
VÍDEO POR SORPRESA
Al inicio de la vista, Iberdrola ha aportado un vídeo con las imágenes de lo sucedido en la protesta para que se incluyera en la causa, que ha provocado la protesta de las defensas por no haberlo presentado en los más de tres años de instrucción. La jueza se ha comprometido a valorarla siempre y cuando haya garantía de que es del día de los hechos y que no está manipulada.
FOTOPERIODISTA ACUSADO
Junto a los activistas, se sienta en el banquillo, con las mismas acusaciones, el fotoperiodista independiente Pedro Armestre, reconocido con varios premios nacionales y que cubrió esa acción como profesional.
Asegura Armestre que durante los tres años y medio que han pasado desde su imputación, se ha visto perjudicado profesionalmente, como le ocurrió en la proclamación del Rey Felipe VI, acto que íba a cubrir para France Press y, sin embargo, denegaron su acreditación "por cuestiones de seguridad".
El propio Armestre comentaba con ironía antes de entrar a la sala, que él fué considerado inadecuado para asistir al acto y, sin embargo, se "les coló" el "pequeño Nicolás".
UNA ACUSADA PODRÁ AMAMANTAR A SU HIJO DURANTE EL JUICIO
Una de las acusadas, madre lactante de un bebé de tres meses, ha pedido permiso a la presidenta del Tribunal para poder atender a su bebé cuando éste lo requiriese. La jueza ha accedido y ha habilitado una sala conjunta para que la madre pueda amamantar a su bebé con tranquilidad y privacidad. El bebé permanecía fuera de la sala con su padre hasta el momento de la alimentación.
El juicio está previsto que se prolongue de tres a cinco dias