El fin de la renta antigua aboca al cierre de comercios en el centro

Málaga

Cerca de un millar de comercios de la provincia de Málaga se verán afectados -a partir del jueves, uno de enero- por la extinción de la "renta antigua".

Acaban ese día los viejos contratos indefinidos y los propietarios de los locales podrán ajustar los alquileres al actual mercado lo que supondrá -en muchos casos- fuertes subidas a las que el arrendatario no pueden hacer frente.

Algunos llevan décadas con sus negocios abiertos pagando una renta antigua y con un contrato indefinido donde se contemplaba que no se subía el alquiler. Pero la extinción de esta renta antigua en base a la reforma que data del año 1985 y que situaba la moratoria a uno de enero de 2015 pone en jaque a estos comercios. Los propietarios subirán el alquiler, en algunos casos hasta un 200 por cien. Hay casos en los que se pasará de pagar 900 euros a 20.000 euros al mes. Ocurre sobre todo en las calles más comerciales.

No hay datos exactos sobre el número de afectados por cada día afloran más negocios. Muchos comerciantes se ven abocados al cierre de su negocio o a trasladar el comercio a otro local bastante más alejado de su clientela habitual.