Aldrige: "Es muy especial estar de vuelta en San Sebastián"

San Sebastián

Es el primer extranjero de era moderna en la Real Sociedad. Un ídolo entre la afición txuri-urdin. Jonh William Aldrige ha pisado el estadio de Anoeta por primera vez. El mítico delantero de Liverpool regresa a San Sebastián por primera vez desde que se marchara de la Real, donde estuvo dos temporadas (40 goles en 75 partidos) dejando una huella imborrable. No pudo jugar más temporadas porque su mujer no se adaptó al País Vasco y tuvo que decidir entre seguir en la Real o regresar a su Liverpool natal con su familia.

Aldrige llegó ayer a San Sebastián, pudo cenar una buena 'txuleta' con su buen amigo el ex central realista Iñaki Alaba y hoy ha sido invitado por el club al palco de Anoeta, donde ha recibido un obsequio de manos del actual presidente realista, Jokin Aperribay. Ha llegado a Anoeta sobre las 16.25 horas y en medio de una gran expectación mediática ha realizado sus primeras declaraciones en su vuelta a San Sebastián. "Muy bien todo, la gente muy educada y cariñosa conmigo. Es muy especial para mí estar de vuelta en San Sebastián. Tengo sensaciones muy agradables, recuerdos de los goles que marqué y me alegra mucho que después de tanto tiempo la gente se siga acordando de mí", ha señalado Aldrige con una sonrisa de oreja a oreja, un Moreno envidiable y unos cuantos kilos de más que cuando se hinchaba a marcar goles en Atotxa.

"Es difícil decir lo que siento y lo qe he sentido al volver, pero estoy muy bien, San Sebastián ha cambiado mucho desde que yo estuve aquí, pero sigue igual de extraordinario y magnífico. He podido pasear por la ciudad y es muy agradable ver que la gente te sigue teniendo cariño. Estoy contento de haber podido volver. Es una sensación muy grata, agradable, especial, difícil de poder expresar con palabras", dice en inglés, con alguna palabra suelta en castellano, porque igual que hace 25 años, Aldrige sigue sabiendo el mismo castellano, poco o casi nada. Lo que no se le ha olvidado es lo que siente al comer en la parte vieja de San Sebastián. "¡¡Oh, yes!!! La txuleta es increíble, que buena está, es fantástica, con un buen vino Rioja, buenísima", expresa sonriendo a carcajada limpia y haciendo reír a todos los compañeros de la prensa. Aldrige también ha tenido palabras para Anoeta, donde él no pudo jugar, porque dejó la Real los años previos al traslado de Atotxa al nuevo estadio en el barrio donostiarra de Amara. "No, no, no es lo mismo. Claro. Atotxa siempre será especial para mí. Love Stadium, ya sabéis. Como un buen estadio inglés, mucha presión, y Anoeta es completamente diferente". Mejor, le insisten desde el fondo. "Es un estadio fantástico, igual que Atotxa tiene algo, pero yo amo Atotxa, muy antiguo, muy cercano, muy especial".

Aldrige estuvo cenando ayer con Alaba y otros ex realistas de su época, y no olvida su paso por la Real. "Sí, estuve Iñaki, fantásticos compañeros, buenos amigos para siempre, eso es lo mejor que dejé en San Sebastián. Es difícil mantener contacto después de tantos años, el fútbol te lleva para un lado y otro y no es fácil". El ex delantero inglés está en San Sebastián hasta el martes, ha llegado junto a su mujer, y ha aprovechado el viaje que le propuso una productora inglesa para hacer un documental sobre su trayectoria, dentro de una película más amplia de los jugadores ingleses que lograron triunfar lejos de las islas británicas. En el descanso, 'Aldo', como se le conocía cariñosamente en San Sebastián, ha saltado al centro del terreno de juego de Anoeta, donde ha recibido un calurosa y enorme afición de la afición de la Real Sociedad. "Le deseo lo mejor, que gane este partido y todos los demás. Siempre lo llevaré en el corazón. Conozco a Moyes, tiene prestigio por pasar por el Manchester, vi todo lo que hizo en el Everto y fue increíble, le costará un poco adaptarse, pero seguro hace cosas muy buenas para la Real". Así se ha despedido Aldrige. Ídolo hace 25 años. Ídolo todavía hoy de la Real Sociedad.