Aplazado el desahucio de una familia por una deuda de 119 euros
La negativa de los sanitarios de no mover a una joven encamada con varias operaciones en la espalda y una infección pulmonar, originó la suspensión temporal del lanzamiento del inmueble
Las Palmas de Gran Canaria
El desahucio ha sido paralizado según fuentes sanitarias porque no puden mover a Sarabel, que se niega a abandonar su vivienda. Es una de las personas enfermas que viven en la casa que quieren desahuciar, donde también está su padre, que sufre una depresión aguda y aún con los ojos abiertos recibe sin mirar y sin hablar. Juanita, la madre, de 66 años de edad, se alegraba de poder seguir teniendo techo un día más.
Fue en 1952 cuando el padre de Juanita, actual ocupante de la vivienda, compró la casa y unos años más tarde cuando firmó ante notario un pacto de Retracto, lo que se conoce como una retroventa. Una situación en la que se encuentra al menos medio centenar de familias más en el barrio teldense de Lomo Magullo (Gran Canaria).
Es un drama técnico, con contratos de hace más de medio siglo y con una familia, los herederos del vendedor que quieren recuperar el terreno y la vivienda al entender que tienen derecho a ello por los acuerdos firmados y porque la Justicia le avala y no el dinero que prestó su padre. La familia que va a ser desahuciada dice que ya saldaron su deuda y también el contrato de la retroventa de 19.000 pesetas de entonces, pero que el prestamista, la persona que recibió el préstamo y un testigo, han fallecido.
Dos miembros de esta familia están enfermos, uno de ellos, el padre postrado en la cama sin poder moverse, hecho que imposibilito el desahucio de ayer. Por eso se ha retrasado. Ayer mucha presencia policial, decenas de personas para intentar evitarlo, varias hospitalizaciones por la tensión vivida...y Nieves, hermana de la actual ocupante de la casa, que se sentía vapuleada por lo que están viviendo.
