El Unicaja no cede y gana al matagigantes de la Liga

Málaga

El Unicaja sigue líder de la Liga Endesa ACB al ganar al Movistar Estudiantes por 78-85.

Empezó muy frío el Unicaja, que se vio con un 11-2 en contra y estuvo casi cuatro minutos con una sola canasta en su haber. Sin embargo, un parcial de 2-10 a favor de los malagueños les metió en el partido y obligó a Txus Vidorreta a pedir tiempo muerto para frenar la remontada (13-12, minuto 4).

Con el paso de los minutos, el dominio en el marcador siguió siendo local, aunque los visitantes se mantenían al acecho y pese a un último acelerón del equipo estudiantil, que le llegó a poner ocho arriba, terminó el cuarto con solo tres puntos de ventaja tras un triple sobre la bocina de Jayson Granger (23-20).

En las dos primeras jugadas del segundo acto, sendos triples de Toolson y Stefansson hicieron olvidar las bajas en el perímetro y dieron las primeras ventajas a los andaluces (23-26). La contienda se igualó, con intercambio de canastas y alternativas en el marcador.

Granger, desde la dirección, y el acierto de Kuzminskas mantenían a los andaluces (36-38, min 16), que con el paso de los minutos calentaban motores, aunque el rebote siguió siendo de un Estudiantes que se marchó al descanso con una mínima ventaja tras una canasta final de Pietro Aradori (43-42).

Tras el descanso, la igualdad siguió en el marcador. Granger continuaba acumulando asistencias ante su exequipo y Kuzminskas sumando puntos en una gran actuación personal, aunque el Movistar Estudiantes no perdió la cara al partido y, a dos minutos del final del cuarto, el italiano Pietro Aradori -con ocho puntos y dos triples- dio la réplica al líder y puso con seis de ventaja a los suyos (60-54, min 28).

Con empate a 61 y todo por decidir arrancó un último cuarto en el que el Unicaja ponía en juego su liderato tras el triunfo matinal del Real Madrid ante el FC Barcelona. Consciente de la importancia del partido, endosó un 2-9 de parcial que empezó a cimentar su victoria (63-70, min 32).

El control parecía ya malagueño, cada vez con ventajas más cómodas, hasta que, a cinco minutos del final, los de Txus Vidorreta recordaron que eran el "matagigantes" de la Liga Endesa y apretaron en defensa con el aliento de su afición como ingrediente extra para intentar arañar las diferencias.

Aunque los locales tuvieron sus opciones con tiros que fallaron, el líder demostró el porqué de su posición en la tabla y superó una dura prueba en la misma pista en la que este año cayeron Real Madrid, FC Barcelona, Dominion Bilbao Basket y FIATC Joventut, sus cuatro perseguidores.