El 43% de los beneficiarios de Cáritas lo son desde hace tres años
La Comunitat Valenciana tiene una tasa de pobreza del 34%. Son datos de la Memoria de Cáritas de la Diócesis de Valencia de 2014.
Valencia
La recuperación económica, por ahora solo alcanza a los más ricos. Algo más de 86.000 personas recibieron algún tipo de ayuda o atención en Cáritas, de ellas, 26.000 son menores. Un 43% de esos beneficiarios lleva ya tres años recibiendo atención, es decir, la pobreza se ha cronificado para esas personas.
La situación sigue siendo grave con una alta tasa de paro, una pobreza extensa e intensa y una riqueza mal distribuida que genera desigualdad. No obstante, se ha reducido el número de personas atendidas, pero se achaca al retorno de muchos inmigrantes a sus paises de origen. Los responsables de Cáritas reclaman un cambio en la Ley de Servicios Sociales, que está claramente desfasada, además de la garantía de que la renta mínima llegue a todas las familias.
En cuanto al perfil de las personas beneficiarias, no dejan de aumentar las de origen español, un 54% de los atendidos por Cáritas son españoles, mientras que disminuyen los extranjeros porque muchos han iniciado el retorno ante la falta de ingresos. Las personas que más demandan el apoyo de Cáritas son mujeres solas y parejas jóvenes con hijos, inmigrantes en situación irregular y personas mayores que acogen a sus hijos y nietos.
En 2014, a través de Cáritas, 525 personas asistieron a un total de 28 cursos de formación y 50 equipos de Cáritas parroquiales trabajan en acciones relacionadas con el empleo. Además, en la actualidad existen 50 economatos que atendieron a 7 500 familias a lo largo del año pasado y un total de 1 186 personas participaron en los 29 proyectos de promoción para menores y sus madres y padres en todo el territorio diocesano.
Para desarrollar estas y otras actividades, Cáritas contó con 5.162 personas voluntarias e invirtió más de 7.900.000 euros a través de las Cáritas parroquiales y en sus programas con los colectivos a los que atiende (inmigrantes, mujeres prostituidas, personas sin hogar, mujeres y menores). De ellos, 4.139.949 euros fueron gastados en ayudas sociales directas a las familias. Las ayudas de las Cáritas parroquiales se destinaron sobre todo a la atención primaria, principalmente a alimentación, vivienda, educación y medicamentos. La mayor parte del dinero que gestiona la institución (71 %) procede de fondos propios.
