Ciudadanos sigue sin deshojar la margarita a 48 horas de la investidura

Málaga

Cuando quedan poco más de 48 horas para la constitución de los ayuntamientos, Ciudadanos mantiene la incógnita sobre a quién apoyará en la investidura, si al popular Francisco de la Torre o a la socialista María Gámez. La formación de Albert Rivera sostiene que tomará una decisión y la hará pública este jueves o el viernes como fecha límite, pero antes la comunicará al resto de fuerzas políticas.

El candidato de Ciudadanos, Juan Cassà, insistió ayer en que “confluye bastante” con el resto de fuerzas políticas, pero dejó claro que no hay un cien por cien de acuerdo con ninguna. “Realmente no nos separan muchas cosas (con el PP), pero es igual que con el PSOE o con IU, en un 80 ó 90 por ciento todas las formaciones tienen unas preocupaciones similares. Lo que queremos es llegar al máximo consenso posible”.

Manifestaciones de Cassà tras reunirse ayer con De la Torre en un breve encuentro de apenas 40 minutos que tuvo lugar en alcaldía y en el que no se llegó a un acuerdo. Cassà y De la Torre tienen que desbloquear uno de los escollos principales en la negociación: la reducción de los cargos de confianza exigida por Ciudadanos y la rebaja salarial de los gerentes. En este último punto, De la Torre se ha lanzado a preguntarle a estos altos directivos de las empresas municipales si estarían dispuestos a esa bajada de sueldos, según fuentes cercanas, que aseguran que las respuestas no están siendo favorables. El afán del alcalde en funciones en su defensa de los emolumentos ha sido tal que, tras las elecciones, estuvo estudiando subirse él mismo el sueldo como alcalde y donar la diferencia a Cáritas para tener más margen de maniobra si Ciudadanos le exigía que ningún gerente cobrase más que él, una opción que finalmente se descartó. Cabe recordar que el regidor de Málaga percibe 62.800 euros brutos anuales, sueldo superado ampliamente por gerentes como el de Urbanismo, que percibe 95.000 y el de la EMT, que asciende a 105.000 más 20.000 euros más en variable. Un asunto sobre el que Cassà, tras la reunión con De la Torre, admitió que se estaba estudiando “caso por caso”, pero sobre el que no se concretó nada.

El caso es que la cuestión de estos sueldos pilló ayer en un renuncio al candidato de Ciudadanos, que trató de pasar de puntillas por esta petición e incluso afirmó: “Yo nunca he dicho que alguien tenga que cobrar menos que el alcalde”. Pese a esas afirmaciones, el programa electoral de esta formación, en su página 33 recoge textualmente: “Limitar los salarios del personal directivo al 90% del salario del alcalde y limitar los pluses

y otras retribuciones para que, en su conjunto, no excedan el sueldo del alcalde”. El caso es que Cassà abría la puerta a ceder durante la negociación para llegar a acuerdos, aunque sin concretar en qué puntos estaba dispuesto a dar un paso atrás.

Pero aviso a navegantes: Cassà ha dejado claro que está dispuesto a firmar un acuerdo de mínimos para facilitar la investidura bien al PP o el PSOE, pero advierte que ese documento no le “ata” para el resto de la legislatura, es decir, que apoyará “todas las propuestas que considere buenas para Málaga vengan de donde venga”, con lo que daría al traste con la pretendida estabilidad que buscan populares o socialistas.

El caso es que en ese encuentro con el alcalde, Cassá aseguró haberle presentado a De la Torre propuestas del resto de formaciones políticas para poder llegar a acuerdos.

El candidato de la formación naranja mantuvo también una reunión con el cabeza de cartel de IU-Málaga para la gente, Eduardo Zorrilla, que insistió en la intención de llegar a un acuerdo de mínimos con Ciudadanos “independientemente del 13 de junio para condicionar las políticas de ese gobierno municipal”. Y durante la comparecencia ante la prensa se produjo la anécdota cuando Zorrilla confundió su formación (IU-Málaga para la gente) con Málaga Ahora (donde se enmarca Podemos). Eso sí, el lapsus apenas le duró unos segundos.