Habrá juicio

Valencia

Esta vez la estrategia de las defensas no ha surtido efecto. Pilar de la Oliva, la presidenta del Tribunal que juzgará a los trece acusados en la pieza de Fitur, la única de las seis de la rama valenciana de Gurtel que se ha quedado aquí, lo ha anunciado tras dos jornadas de cuestiones previas en las que todas las defensas insistían: el juicio debía suspenderse, aplazarse o incluso anularse, según quién.

En abril pasado el juicio, que había comenzado a celebrarse, se suspendió. Las defensas de los acusados aseguraron que no todas habían tenido acceso a la documentación que forma parte de la causa que se encuentra en la Audiencia Nacional. Información a la que sólo han tenido acceso, desde el principio, aquellas partes personadas en la pieza principal de Gurtel.

A pesar de que la propia Audiencia Nacional no lo consideraba necesario autorizó al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana a acceder a esa información depositada en un registro informático "Al Fresco" y facilitaron las claves correspondientes. Desde el 26 de mayo tienen acceso las partes a esos archivos.

Pero consideran que es demasiada información. Que no han tenido tiempo de verla. Además se han producido cambios de abogados. Y a todo eso suman, las defensas de los cabecillas de la red Gurtel, una petición de nulidad porque afirman que durante la investigación se vulneraron derechos fundamentales de sus defendidos. De paso, acusaron a la Fiscalía de actuar como acusación, de olvidar su función como garante del procedimiento.

La fiscalía respondió una por una a las cuestiones previas para insistir en lo que viene manteniendo ya desde abril pasado: el derecho de defensa es muy amplio, pero no infinito. El Supremo establece que puede ejercerse "dentro de límites razonables" y en este caso las defensas se han excedido.

Finalmente ese criterio ha sido el de la Sala que sí permitirá, atendiendo a una de las cuestiones previas presentadas por las defensas, que los abogados estén junto a sus patrocinados cuando sean interrogados. Eso ocurrirá a partir del próximo día 19.

El juicio, en principio, nos llevará hasta noviembre. Trece son los acusados. Dos ex conselleras de turismo, Milagrosa Martínez y Angélica Such; y los cabecillas de la Red Gurtel entre ellos. Se enfrentan a una petición de pena de hasta 14 años de prisión por haber adjudicado, irregularmente, la presencia de la Comunitat Valenciana en Fitur, los pabellones para mostrar la oferta turística de la Comunitat, a Orange Market, filial valenciana del grupo Correa, durante varios años.