Europa empieza con victoria

Bilbao

Iago Herrerín y Aritz Aduriz han dado una victoria de oro hoy Athletic Club en San Mamés en el arranque de la fase de grupos de la Liga Europa, una remontada hasta el 3-1 final en la que el meta se ha encargado de frenar las numerosas acometidas del Augsburgo y el ariete de ejecutar al conjunto alemán.

Aduriz ha remontado en la segunda mitad un tanto al cuarto de hora de partido de Halil Altintop, el hermano gemelo del exmadridista Hamit, con dos goles en la segunda mitad a su estilo.

El primero ha sido un incontestable cabezazo a saque de córner botado por Beñat; y en el segundo ha reventado un balón suelto al borde del área pequeña por el que porfió Markel Susaeta, que redondeó el resultado con un golazo final que premió su insistencia y pelea durante todo el partido.

No obstante, para que los goles de Aduriz y Susaeta le diesen los tres puntos al Athletic Herrerín se tuvo que multiplicar durante todo el encuentro con no menos de media docena de espléndidas intervenciones, tanto con 0-1, como con 1-1 y 2-1, que impidieron al Augsburgo lograr el resultado que mereció en su notable debut internacional.

Con el 3-1 el conjunto vasco ha logrado el objetivo marcado de empezar ganando en casa ante un calendario próximo que le depara dos salidas consecutivas a Alkmaar y Belgrado para medirse al AZ y el Partizán, que ha ganado hoy el partido entre ambos (3-2) en la capital serbia.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Comenzó mandando el Athletic, que desaprovechó una ocasión de la que seguro se acordó en adelante. Una buena incorporación de De Marcos por la banda derecha con un gran centro hacía Aduriz que el ariete remató impreciso.

Era solo el minuto 6 del partido pero al conjunto vasco se le fue una oportunidad que pudo cambiar un partido que se le complicó sobremanera a los leones en la primera mitad.

Un disparo de Beñat y otro un intento de Aduriz, ambos de menos enjundia, precedieron al gol alemán y el cambio que sufrió el partido con él.

Lekue despejó hacia el centro desde la línea de fondo, Eswein agradeció el detalle y disparó sobre Iago, que repelió como pudo. Pero el balón fue hacia Altintop, que a la segunda y de cabeza batió al meta bilbaíno.

Se creció el Augsburgo con ese tanto al cuarto de hora de choque y, bien lanzado por Baier, buscó un segundo gol entre la zozobra de la defensa local. Así, Kohr se encontró con la espalda de Laporte y Matavz y Ji con un espléndido Iago Herrerín en tres jugadas que pudieron suponer el 1-2 en torno a la media hora de juego.

No obstante, la primera mitad terminó con una ocasión de Raúl García a pase de Aduriz. Pero el navarro, como su equipo hasta entonces, se mostró impreciso y acelerado en exceso.

A regreso de vestuarios, Aduriz se vio en la misma que en la primera mitad y esta vez no perdonó. Beñat sacó un córner desde la derecha y el ariete internacional, deshaciéndose de Klavan con un bloqueo, se queda solo para fusilar a Hitz con uno de sus inapelables cabezazos.

Se animó la grada de San Mamés con el empate, pero el Augsburgo no se amilanó. Es más, recuperó rápido resuello y buscó el segundo tanto en dos acciones en las que Esswein hizo sufrir lo indecible a Lekue pero acabó encontrándose con Herrerín, que despejó sus dos disparos con opciones de gol.

Y cuando el partido era de nuevo más visitante que local apareció de nuevo Aduriz para reventar el balón y acabar con las dudas de su equipo tras un robo de balón que Raúl García abrió a Susaeta y con el que el eibarrés insistió e insistió hasta que apareció Aduriz para disipar dudas.

Susaeta recibió el premio a su actuación con un gran disparo desde la frontal que se coló por la escuadra de Hitz que puso el 31 final, un resultados excelente para el Athletic pero demasiado castigo para un Augsburgo que no mereció perder en la primera aparición continental de su historia.