El Ayuntamiento no pagará el “falso intercambiador” del Complejo Canalejas
Ahora Madrid también le pide a Villar Mir que modifique los elementos que rompían la estética de la cornisa desde la Puerta del Sol
Madrid
El equipo de Gobierno no va a financiar con dinero público el "falso intercambiador" ligado a la Operación Canalejas. Entiende Ahora Madrid que la construcción de esta estación subterránea de autobuses, acordada durante el mandato de Ana Botella, no es algo que vaya a suponer un beneficio para la ciudad, sino para el grupo Villar Mir, promotor del proyecto.
Esa "estación subterránea de autobuses" es uno de los elementos que el Consistorio cuestiona y así lo ha planteado en las mesas de trabajo con los promotores. "Les hemos pedido que replanteen un intercambiador que no beneficia a la ciudad sino en todo caso al adjudicatario del hotel", ha expuesto José Manuel Calvo, delegado de Desarrollo Urbano Sostenible.
El proyecto del Complejo Canalejas en la plaza del mismo nombre, junto a la Puerta del Sol, incluía un intercambiador de transporte subterráneo y un aparcamiento de cuatro plantas y 15.000 metros cuadrados para 450 vehículos.
El Ayuntamiento recuerda además que la Fiscalía de Medioambiente y Urbanismo está investigando la destrucción de Patrimonio Histórico en ese Complejo. El grupo Villar Mir se enfrenta a una posible sanción, además de verse obligado a restaurar todos los elementos protegidos que fueron demolidos sin contar con licencia. La Comunidad de Madrid también ha incoado un expediente.
El Ayuntamiento continúa negociando con el promotor, pendiente aún de la licencia definitiva para poder levantar viviendas de lujo y un hotel, además de un centro comercial, en esa manzana de la discordia, porque tampoco está de acuerdo con el impacto visual del proyecto.
Ahora Madrid le ha pedido a la constructora OHL que rehaga el proyecto y modifique los elementos que rompían la estética de la cornisa desde la Puerta del Sol.
Se trata de un conjunto de edificios contiguos localizados en la calle Alcalá, la plaza de Canalejas y la Carrera de San Jerónimo, desocupados desde hace 10 años y alguno de los cuales data de 1887.
Para poder impulsar este plan, la Comunidad de Madrid tuvo modificar el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM) en el ámbito Sevilla-Canalejas para hacer posible agregar los seis edificios protegidos que componen la manzana (calle Alcalá, 6, 8, 10, 12 y 14 y el número 1 de la plaza de Canalejas) y crear un único complejo de usos múltiples: comercial, recreativo, hospedaje, oficinas y garaje.