Así es la sala que acogerá el juicio del 'caso Nóos'
Está en el polígono de Son Rossinyol, frente a la cárcel de Palma
Palma de Mallorca
Por primera vez, la prensa hemos tenido acceso hoy a la sala en la que se celebrará el juicio por el caso Nóos. El edificio que se blindará para la ocasión es el de la Escuela Balear de la Administración Pública, situado en el Polígono de Son Rossinyol. Se encuentra enclavado entre la Conselleria de Medio Ambiente y una gran nave de una empresa de electrodomésticos.
El edificio da a la carretera y justo enfrente se encuentra la cárcel de Palma, que se puede ver desde la misma entrada al lugar. La sala que se ha habilitado para llevar a cabo las sesiones está en la tercera planta, con vistas a la Sierra de Tramuntana. Se trata de la misma sala que ya se utilizó para celebrar el juicio por el caso Kabul contra los principales clanes de la droga de Palma y que permite un aforo de hasta 120 personas.
Presidiéndo la sala, el estrado en el que se sentarán los tres magistrados que juzgarán el asunto. Juan Pedro Yllanes, presidente del tribunal, Samantha Romero, la jueza ponente encargada de elaborar la sentencia y Eleonor Moyá, la tercera magistrada que completa la sección primera. Junto a ellos se ha instalado una gran pantalla.
Enfrente, una hilera de más de 60 sillas en las que podrán sentarse los acusados y parte del público que acceda a la sala. A la derecha de los magistrados, un estrado en el que se sentarán los abogados defensores y los acusados que deseen estar junto a ellos. A la izquierda, los fiscales anticorrupción y las acusaciones.
El Tribunal Superior de Justicia de Baleares ha habilitado una sala anexa para los medios de comunicación, con capacidad para más de 160 personas. Se trata de un espacio situado en la misma planta que la sala de vistas. Allí, el juicio se seguirá a través de la televisión y de la señal en director que se emitirá.
El juicio comenzará el once de enero. La Infanta Cristina, para la que se piden ocho años de cárcel como cooperadora en dos delitos fiscales, su marido, Iñaki Urdangarin, y 16 acusados más se sentarán en el banquillo cinco años después de que el juez José Castro iniciara la investigación sobre las actividades presuntamente irregulares del Instituto Nóos. La instrucción ha girado en torno al presunto desvío de más de seis millones de euros públicos.