El TSJA confirma los 15 años de cárcel para el hombre que atropelló a otro en la acera
Los hechos ocurrieron la mañana del 22 de febrero de 2014 en la avenida Montes Sierra de Sevilla


Sevilla
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la pena de quince años de cárcel que le impuso la Audiencia de Sevilla a Jonathan por atropellar mortalmente y de forma intencionada a un hombre cuando caminaba por la acera.
La decisión del TSJA, que será recurrida ante el Tribunal Supremo, es la respuesta al recurso presentado por el abogado del acusado, Manuel Castaño, que pidió rebajar de 15 a 4 años la pena porque consideró que existían las atenuantes de intoxicación etílica, arrebato u obcecación, reparación del daño y colaboración con la justicia.
En su resolución, el TSJA solo ha tenido en cuenta la atenuante analógica de reparación del daño porque, antes del juicio, el acusado depositó 44.000 euros para la familia de la víctima, entre las que se incluyen dos hijas gemelas, y para lo que dijo que había vendido "hasta el anillo de pedida".
Tras la confirmación de la pena por el TSJA, que incluía el pago de 225.000 euros a los familiares del atropellado, a los que hay que descontar los 44.000 que pagó, el abogado ha anunciado a Efe que recurrirá en casación ante el Tribunal Supremo para que la atenuante analógica sea considerada como muy cualificada.
Después de un veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular, la Audiencia condenó por asesinato al acusado, conocido como Yoni el Prestamista, de 46 años y con cuatro hijos y tres nietos.
El condenado, antes del atropello, recibió una agresión en el cuello con una botella de cristal rota por parte del hombre al que luego pasó por encima con su coche, por lo que el abogado alegó la atenuante de arrebato u obcecación.
Los hechos ocurrieron la mañana del 22 de febrero de 2014 en la avenida Montes Sierra de Sevilla y después de que el acusado dijera que bebió siete cervezas y diez cubatas.
En el juicio el acusado reconoció el atropello de un hombre que andaba por la acera y que minutos antes le agredió en el cuello, y dijo que lo hizo porque se volvió "loco" tras beber cerveza y cubatas.
"Iba para el hospital, lo vi, di un volantazo y ya está", indicó el acusado para explicar que atropelló a la víctima a menos de doscientos metros del bar la Trocha, en el que fue agredido.




