Continúan las negociaciones para las ordenanzas fiscales

Zaragoza

El teniente de alcalde de Economía del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, ha iniciado una nueva ronda de negociaciones con el resto de los grupos municipales para intentar cerrar un acuerdo para aprobar las ordenanzas fiscales de 2016. El plazo para que los grupos presenten votos particulares al borrador del gobierno termina este miércoles. 

De momento, las negociaciones no están siendo fáciles: "con Ciudadanos la relación es muy fluida, con CHA hay más puntos de acuerdo y con el PSOE hay dos grandes disensos", ha señalado Rivarés, quien ha anunciado que la propuesta del gobierno "ha variado para aceptar propuestas de CHA y del PSOE pero todavía no he visto qué propuestas del gobierno acepta el PSOE". Hasta el punto de que Rivarés teme que "haya una ordenanza aprobada por el PP y el PSOE porque tienen una posición bastante igual; eso puede pasar". Una línea roja de Zaragoza en Común es aumentar la recaudación del año pasado vía impuestos, pero el PSOE prometió en campaña no aumentar la presión fiscal.

 Tras la reunión con los socialistas, su portavoz, Javier Trívez, reconocía que no había habido avances y alertaba que "sin esto no lo acepta y al final hay una ruptura, por supuesto que vamos a intentar que las tesis del PSOE sean las que se impongan", ha asegurado. "Con los que sumemos", ha subrayado. 

Cesiones de ZeC

El día que el gobierno aprobó su borrador de ordenanzas ya había ido más allá de lo previsto inicialmente en la rebaja del tipo impositivo del IBIresidencia. Fernando Rivarés pensaba bajarlo un 20% y el gobierno ya aprobó una propuesta de bajada del 21'7%, como planteó el PSOE. Han aceptado, por ejemplo, de CHA, mantener algunas de las bonificaciones del IAE que pensaban eliminar. Y también, fijar el umbral a partir del que se subirá el IBI a los usos industriales y de edificios comerciales o de oficinas a los inmuebles con valor catastral a partir de los 500.000 euros. Ahora ese umbral está en un millón de euros y la idea de ZeC era aplicarlo al 10% de inmuebles de este tipo de más valor

El principal escollo con el PSOE es que ZeC quiere recaudar vía impuestos más que el año pasado; en principio, 20 millones más, pero más en cualquier caso. Y eso choca con la promesa electoral del PSOE de no aumentar la presión fiscal.  El PSOE tampoco comparte la intención de subir el tipo impositivo del IBI a los usos industriales y a los bloques de edificios de oficinas y comerciales.

 PP y Ciudadanos

 Tanto el PP como Ciudadanos estaban también muy molestos con la intención de ZeC de suprimir las bonificaciones en el IAE para los nuevos emprendedores y para la creación de empleo. El gobierno podría estar dispuesto a mantener algunas de esas bonificaciones para nuevos empleos, pero con unos límites máximos de cifra de negocio. Con el PP, prácticamente no ha habido negociación. Los populares no pretendían ponerlo fácil. 

Con Ciudadanos, el contacto es fluido pero aunque el gobierno municipal se ha rebajado el umbral para la subida del IBI industrial (como pedía también CHA),  en Ciudadanos no se dan por satisfechos porque, según ha señalado Sara Fernández, "dentro del IBI, en la parte de residencial estamos más próximos pero en los usos diferenciados - industrial, comercial, oficinas -, seguimos queriendo mantener los tipos que había en las ordenanzas del año pasado". De momento, Ciudadanos tiene previsto presentar mañana en sus votos particulares las mismas propuestas que planteó antes de que el gobierno aprobase su borrador.