Tribunales

"No fue premeditado"

Fabiola, la acusada de matar a su marido, en colaboración con su amante, ha asegurado que el desenlace de los hechos "fue sobrevevenido". Por su parte, Salvador, ha reconocido los hechos, aunque ha alegado que padece un trastorno de personalidad

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Murcia

Este lunes ha arrancado en la Audiencia Provincial el juicio, con jurado popular, contra Fabiola y Salvador, para los que el fiscal pide penas que suman 37 años de cárcel.

Los hechos ocurrieron a finales de abril de 2013, cuando los acusados, que habían iniciado una relación sentimental unos meses atrás, se pusieron de acuerdo para acabar con el marido de Fabiola, casado con ésta en bienes gananciales.

Para ello, la acusada quedó con su marido en una acequia de Puente Tocinos, con el pretexto de tomar unas copas y mantener relaciones sexuales. Tras llegar al lugar, sobre la medianoche, Fabiola avisó a su amante, que entró en el coche por la parte trasera, y degolló al marido con un cuchillo de grandes dimensiones.

El abogado de la acusada ha dicho que Fabiola sufría humillaciones de su marido, sobre todo de tipo sexual, lo que la había llevado a cosumir drogas. No obstante, ha insistido en que "no había un plan premeditado" y asegura que "no sabe qué se metió a su amante en la cabeza para degollarlo".

El acusado, según su abogado, reconoce los hechos y muestra arrepentimiento, pero también alega que "padece desde hace años un trastorno de personalidad".

Para el abogado de la acusación particular, que ejerce la familia, "sí existía un plan para acabar con la vida del hombre".

Los acusados, según el fiscal, planificaron la muerte del marido y trataron de simular que se trataba de un robo, sustrayéndole a la víctima la cartera y extrayendo 1.000 euros de una tarjeta de crédito.

Para ella el fiscal pide 20 de cárcel, mientras que para él solicita 17 años.

 
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