Acuerdo unánime en sanidad
Se pone fin al conflicto por el impago de la carrera profesional
Fotografía después del acuerdo alcanzado entre sindicatos e IbSalud. / IbSalud
Palma de Mallorca
Los sindicatos de la sanidad pública han alcanzado un acuerdo con la conselleria de Salud para el pago de la carrera profesional. Hay un consenso unitario y se cierra el conflicto en el sector, ya no hay amenaza de huelga.
A partir de enero de 2016 las nuevas incorporaciones de profesionales sanitarios comenzarán a cobrar este complemento, 3.942 trabajadores públicos, y el dinero se obtiene con el aplazo de la paga extra congelada en 2012. En enero de 2017 se cobraría un 25 por ciento y en enero de 2018 el otro 25 por ciento restante.
Con este acuerdo el personal estatutario, es decir, los fijos e interinos, tanto sanitarios como no sanitarios, sin reconocimiento de carrerra, la recibirán de la siguiente forma:
- 25 por ciento en enero de 2016
- 50 por ciento en enero de 2017
- 95 por ciento en enero de 2018
Por otro lado, el personal estatutario que ascienda de grado recibirá desde el 73 por ciento actual hasta el 95 por ciento en enero de 2018.
Los mayores de 60 años con carrera profesional reconocida recibirán el 87 por ciento en enero de 2016, y el 95 por ciento en enero de 2017.
Además, se van a ir incorporando los "derechos perdidos en los recortes", según Miguel Lázaro del Sindicato Médico de Baleares.
Desde Comisiones Obreras, Manel García, deja claro que finalmente "no habrá huelga". Un escenario que "no querían" desde un principio.
En el sindicato CSIF, Guillem Vila, habla de un acuerdo "duro" que finalmente beneficiará a los trabajadores sanitarios.
Un acuerdo por unanimidad que ha sido posible gracias a "ambas partes", según, Xisca Galmés del sindicato USAE.
Desde UGT, Miquel Ángel Romero, asegura que este conflicto "se podría haber evitado desde un principio".
Jorge Tera, del sindicato de enfermería, recuerda que a partir de ahora "se podrán dedicar a otros asuntos", que preocupan a los ciudadanos.
Desde el IbSalud, Juli Fuster, el director general, considera que se trata de un "acuerdo muy positivo" teniendo en cuenta que las cuentas públicas están "limitadas".
Este acuerdo por tanto ya está ratificado y pone fin así al conflicto sanitario.
