El Athletic sigue intratable

Bilbao

Ni el cansancio, las apenas 60 horas transcurridas desde el partido frente al Partizan, ni los escasos cambios de Valverde en el once inicial, ni el calor, ni el horario matinal, ni el Espanyol. Nada puede con un Athletic enrachado.

Al conjunto rojiblanco además del fútbol le sonríe la suerte en su mejor momento de forma. Porque el Espanyol comenzó algo mejor, intentando imponer su ritmo al partido. Y entonces apareció Iñaki Williams para poner el colofón a su mejor semana. A los nueve minutos de juego se sacó de la manga una jugada para enmarcar: sombrero ante dos defensas pericos y volea ante la que nada pudo hacer Pau López.

Se colocó por delante la escuadra bilbaína pero el Espanyol amenazó poco después la meta de Iraizoz con una magnífica contra de Caicedo que nadie supo rematar.

Llegó el partido al descanso con el 1-0 y sin un dominador claro de la posesión ni las ocasiones. Con la reanudación Valverde sorprendió introduciento el primer cambio en sus filas: Susaeta por Sabin Merino.

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A los pocos minutos de juego llegó el momento que marcaría el devenir de todo el tramo final. Una fea entrada de Gurpegi sirvió como excusa a ambos equipos para enzarzarse en una tangana que Undiano Mallenco solventó con sendas tarjetas amarillas para el navarro, Diop y Caicedo.

De ahí en adelante el fútbol apenas existió. El juego se fue trabando y el partido, de hecho, concluyó con ocho tarjetas amarillas y 40 faltas -24 del Espanyol y 16 del Athletic-.

Sin embargo, en una de las llegadas rojiblancas Raúl García remató de cabeza un buen centro de Susaeta y marcó el 2-1 definitivo. Con esta victoria, los de Valverde se sitúan octavos en la clasificación y encaran el parón liguero de la próxima semana con la moral por las nubes: líderes de su grupo en Europa y con seis victorias en los últimos siete encuentros. A vuelta del descanso espera el Granada.