La Audiencia ordena que se vea como delito la muerte del policía atropellado

Sevilla

La Audiencia de Sevilla ha ordenado al juzgado de instrucción 16 que instruya como un delito de imprudencia grave, y no como una falta, el accidente en el que murió Sergio Rodríguez, un policía local que estaba de servicio hace dos años. Su moto fue embestida por una conductora que se saltó un semáforo en rojo por equivocación, según concluyó el atestado policial.

La mujer estaba parada con su coche en el cruce de María Auxiliadora con José Laguillo cuando reanudó la marcha al atender a un semáforo que no le correspondía. Arrolló al motorista que circulaba por el carril bus.

El juez que recibió el atestado y la Fiscalía decidieron que el caso debía resolverse con un juicio de faltas y no como delito. Pero la familia recurrió a la Audiencia, que le ha dado la razón.

La conductora dio negativo en la prueba de alcoholemia, en el suelo no existían señales de frenado ni tampoco había indicios de una conducción temeraria.

Los hechos tuvieron lugar a las 18,50 horas del 16 de diciembre de 2013, cuando el agente de la Policía Local, que se encontraba en acto de servicio, circulaba por el carril bus por la Ronda Histórica en dirección a La Macarena. Chocó contra un vehículo que, en ese momento, se encontraba haciendo el giro desde María Auxiliadora a José Laguillo.