Hay que ser atrevidos y valientes
Al Mallorca le falta ambición, atrevimiento y valentía. Y no le queda otra que arriesgar de una vez si quiere mejorar sus resultados
Palma de Mallorca
Texto del editorial "Ojo de halcón" del responsable de deportes de Radio Mallorca en la edición de SER Deportivos Baleares del lunes 16 de noviembre:
Es difícil hablar de deporte o dar importancia a una derrota con lo que estamos viviendo en los últimos días pero no queda otra que seguir y esperar que este mundo recupere el sentido común y el respeto entre todos.
El Mallorca vuelve a estar en descenso tras la derrota en Pamplona... Un dato objetivo. Como también lo son la falta de gol o que por mucho que se llevasen seis jornadas sin perder el equipo no ha salido de la zona de abajo cuando alcanzamos ya el primer tercio de la temporada. También es cierto que a pesar de estar en descenso, dos victorias te meten arriba porque apenas hay 6 puntos con los puestos de playoff o que el equipo transmite buenas sensaciones, pero no es suficiente con ello... Hay que ganar. No queda otra. Y más en una liga tan igualada.
El Mallorca ha mejorado en defensa, eso es indiscutible. Es el segundo equipo que menos goles recibe, con 12, pero solo ha marcado 8, el que menos. Y así no se ganan partidos. Como mucho se empata, si eres capaz de que no te marquen, como ha pasado en otras temporadas y para ganar hace falta ser atrevido, valiente y querer ganar. El Mallorca, en muchos momentos, transmite que juega a no recibir goles y luego ya se verá. Y eso solo vale para equipos que ansían la permanencia... Pero no para uno que está obligado a estar arriba. Ya es hora de cambiar de mensaje y ser más ambiciosos. Sencillamente, porque con lo que se ha hecho hasta ahora, no vale. Y como muestra, un aspecto incomprensible: ayer, con derrota por 2-1, Albert Ferrer decidió quitar a Coro para meter a Bianchi. Delantero por delantero. Perdiendo 2 a 1... No por tener mayor número de atacantes se ataca mejor ni eso te garantiza goles, pero el mensaje que mandas es el que es al campo y a la grada. Al Mallorca le falta ambición, atrevimiento y valentía. Y no le queda otra que arriesgar de una vez si quiere mejorar.
