Comienza el juicio por el crimen de Ricla

Zaragoza

Antonio Losilla, único acusado del crimen de Ricla, niega haber matado a su mujer Pilar Cebrián en 2012. Así lo ha reconocido en la primera sesión del juicio seguido en la Audiencia Provincial de Zaragoza, con un jurado popular. Añadía además, que su confesión el día del registro de su domicilio sólo fue porque se sintió coaccionado, amenazado y chantajeado por la Policía.

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La noche del 2 abril, Losilla y su mujer mantuvieron una discusión por unas joyas, pero ni la tiró al suelo, ni la mató, ni la descuartizó: "yo jamás he dicho que he matado a mi mujer porque es falso". Su supuesta confesión fue por proteger a su familia, para evitar que incriminase a su hermano en la muerte de Pilar Cebrián ni a sus hijos, uno de ellos por tráfico de drogas. 

Eso sí, no niega que comprase poliuretano y un desatascador pero no por el descuartizamiento sino para desatascar las cañerías, embozadas por los cabellos de su hija. Ha negado rotundamente que fuera por los restos de sangre y restos orgánicos del descuartizamiento.