Los peritos detectan salarios por encima de lo pactado y contratos 'fantasma'
Los técnicos afirman que han encontrado "irregularidades en los ámbitos laboral y de la Seguridad Social"
Sevilla
El informe de los peritos judiciales sobre las relaciones laborales en Invercaria concluye que la empresa ha pagado "indebidamente" salarios a supuestos empleados que nunca trabajaron en la sociedad, entre ellos Juan María González, Óscar Fernández, Jamie Lynn o Álvaro Leiva. Además, los peritos aseguran que algunos de los trabajadores de Invercaria han cobrado más de lo que dicen sus nóminas; entre ellos Cristóbal Cantos, 54.000 euros, según el informe pericial.
El documento asegura que Tomás Pérez Sauquillo o Laura Gómiz, exdirectores generales de Invercaria, tuvieron una relación mercantil y no laboral con Invercaria porque ostentaron el cargo de presidentes y consejeros de la entidad al mismo tiempo. De ahí que su indemnización por despido, según los peritos, es improcedente, lo mismo que las cotizaciones a la Seguridad Social abonadas por Invercaria. En el caso de Pérez Sauquillo, según los peritos, "no suscribió ningún contrato de trabajo con Invercaria" aunque su sueldo se documentaba en recibos ni firmados ni sellados.
Los peritos afirman que Juan María González Mejías cobró de Invercaria en los dos periodos que estuvo contratado unos 254 mil euros. González no hizo funciones de dirección, gerencia o administración en Invercaria. Tampoco realizó actividad como director de promoción. De ahí que tampoco esté justificado un préstamo personal que Invercaria le hizo, como si fuera empleado de la empresa.
Óscar Fernández, trabajaba en Andalucía Emprende en Málaga, pero Invercaria el pagó en salarios 300.000 euros. Jamie Lynn desempeñaba su trabajo en la Consejería de Innovación y le pagó sus nóminas Invercaria, 168.00 euros.
El informe entiende que al trabajador Antonio Nieto Invercaria le ha abonado en nómina un exceso de salario de 270.000 euros; a Santiago Abad 61.000 o a Natacha González de más de 32.000.
Los peritos detectan el caso de una persona contratada como conductor, Miguel Gago, que según ellos cobraba cantidades "llamativas" para el puesto. Algunos meses entre nueve y diez mil euros.
En opinión de los peritos, los préstamos que Invercaria concedía a su personal no están sometidos "a la norma convencional y dependen de la voluntad de las partes". Eran préstamos a interés 0 y concedidos sin garantía.