“El tiempo no está loco”

Granada

Vivimos y consumimos como si los recursos del planeta fueran infinitos, como si todo el derroche que nos envuelve en nuestro bienestar cotidiano fuera gratuito. Y no lo es. Ni mucho menos.

En la Cumbre del Clima de París se decide en estos días el futuro de la humanidad. Lo sé, suena a eslogan de película barata, pero es la maldita realidad. Ya les digo.

Dependemos de que nuestros gobernantes dejen de ser guardianes de los intereses empresariales y se propongan, en serio, a sacarnos de esta espiral de autodestrucción que también llegará a Granada.

Porque, ¿se imaginan un verano aún más caluroso? ¿Una sequía aún más larga que la que padecimos hace no tantos años o temporales más frecuentes en la costa?

Si no hacemos algo ahora, nada nos librará de sufrir las consecuencias del cambio climático. Y en Granada lo vamos a pasar especialmente mal.