Desarticulada una banda criminal especializada en el robo de cable de cobre en transformadores eléctricos
En la operación "Pivote" se han detenido a siete personas, en su mayoría de nacionalidad rumana y se localizó una planta en Ciempozuelos que compra los efectos robados
Guardia Civil Ciudad Real
Ciudad Real
Desarticulada una banda dedicada al robo de cable de cobre en explotaciones agrícolas en la provincia de Ciudad Real. La operación bautizada como "pivote" se ha saldado con 7 personas detenidas con edades entre los 23 y 46 años, en su mayoría de nacionalidad rumana y vecinos de Tomelloso. Se les imputa hasta 41 delitos de robos y pertenencia a grupo criminal. Entre ellos se encuentran 3 vecinos de Parla y Leganés, que regentaban una planta recuperadora en Ciempozuelos como presuntos autores de un delito continuado de receptación.
Se ha recuperado 300 kilogramos de cable de cobre procedentes de la sustracción de transformadores eléctricos.
La investigación se inició el pasado mes de agosto en Manzanares tras las denuncias presentadas por robos de cable. Se pudo comprobar cómo circulaba un vehiculo sospechosos por caminos donde se habían producido robos y cuyo propietario tenía numerosos antecedentes.
La organización, compuesta por 5 personas, partía de Tomelloso en dos vehículos, propiedad del jefe del grupo criminal el cual determinaba, cuando y dónde se iban a cometer los hechos delictivos. Actuaban por la noche, en lugares previamente seleccionados, adoptando fuertes medidas de seguridad, durante la ruta para evitar seguimientos de efectivos policiales. Después el material robado lo trasladaban, a horas tempranas los sábados, a la planta de Ciempozuelos donde vendían estos objetos, ventas que se producían antes de la apertura de su horario comercial.
Con todas las pruebas incriminatorias se realizó un registro domiciliario en Tomelloso donde se encontraron fundas de cable de cobre, 10 garrafas de gasóleo, 2 bombas manuales de extracción de gasóleo, una pértiga para desconectar la electricidad de los transformadores y diverso material artesanal para la comisión de los robos. Los enseres y daños producidos se han valorado en 150.000 euros.
Los robos se perpetraron en Manzanares, Socuellamos, Campo de Criptana, Daimiel, Puerto Lápice, Villarta de San Juan, Alhambra, La Solana, Herencia, Torrenueva, Pozuelo, Moral, Torralba o Almadén.
