El laberinto sin fin de Carmela y Manuel
Una vecina de Puertollano no puede cobrar la pensión por invalidez que tiene concedida por mantener una deuda con la Seguridad Social... que no podrá pagar si no percibe su pensión

Unidad de Recaudación Ejecutiva de la Tesorería General de la Seguridad Social en Puertollano / Mario Carrero

Carmela Sánchez y su marido, Manuel Gómez, viven una situación desesperada. Hace más de una década, Carmela contrajo una deuda de dos mil euros con la Seguridad Social, que no pudo pagar entonces y que merced a los recargos ha alcanzado la cuantía de 10.300 euros... y subiendo. Paralelamente, Carmela, que padece esclerosis múltiple tiene concedida desde marzo de este año una pensión de invalidez de 356 euros mensuales que, sin embargo, no puede cobrar merced a la existencia de esta deuda. A resultas de ello, Carmela vive en un laberinto: no puede trabajar, no puede cobrar su pensión y tampoco puede ponerse al día con la Seguridad Social
A lo largo de los años, Carmela y su marido han intentado en múltiples ocasiones solucionar esta situación , topándose siempre con lo que denuncian como obstruccionismo intencionado de la jefa de la unidad de recaudación ejecutiva de la delegación de Puertollano. De hecho, Carmela, para poder cobrar su pensión, llegó a ofrecer pagar la deuda fraccionadamente a través de la pensión de 700 euros de Manuel, a pesar de que tienen separación de bienes. La negativa que recibieron es más paradójica cuándo en las últimas semanas 250 euros de esta pensión han sido embargados por la Seguridad Social... a pesar de ser ilegal precisamente por la citada separación de bienes y porque la cantidad resultante es muy inferior a los 648 euros de salario mínimo interprofesional
En los últimos días, esta pareja de Puertollano se reunía con el Subdirector General de Tesorería de la Seguridad Social en Ciudad Real quién reconocía el error cometido en el embargo de la pensión y les trasladaba nuevas condiciones: pagando 4800 euros, Carmela comenzará a cobrar su pensión. Sin embargo, esta cantidad queda lejos de las posibilidades de Carmela y Manuel, sin propiedades a su nombre ni posibilidad de acceder a esta suma a través de un préstamo bancario por carecer de avalistas. Y mientras se deslía la madeja, esta familia y su hija embarazada pasan las navidades más tristes de sus vidas con 450 euros...

Mario Carrero
Es filólogo hispánico por la UCLM y licenciado en Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid....




