Reconocen la incapacidad parcial e indemnización de 50.000 euros a un trabajador por accidente laboral

Palencia

La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León con sede en Valladolid, ha dictado una sentencia en la que reconoce la incapacidad permanente parcial derivada de un accidente de trabajo a un operario de limpieza y condena a la Mutua Fremap, como aseguradora del riesgo profesional, a indemnizar a dicho trabajador con 50.256 euros.

Contra la sentencia que beneficia al trabajador, que ha estado representado por la abogada palentina Amaya Rodríguez, cabe recurso de casación para unificación de doctrina. Se trata de una resolución que estima parcialmente un recurso presentado por el trabajador que sufrió el accidente y al que, incialmente, la administración no le reconocía la incapacidad.

Según se refleja en la sentencia, el operario ha venido prestando sus servicios laborales para la empresa URBASER con la categoría profesional de conductor-peón de recogida de residuos. El 22 de septiembre de 2011, mientras prestaba servicios para dicha empresa, el demandante sufrió un accidente de trabajo, con el diagnóstico de tenosinovitis estenosante de la mano derecha tras el que inició un proceso de incapacidad temporal.

En todo el proceso hasta llegar a la sentencia actual, el trabajador llegó a recibir el alta el 13 de febrero de 2014. El 4 de junio fue cambiado por la empresa de puesto de trabajo, pasando a desempeñar la función de conductor de cisterna. El 15 de julio sólo se le reconocían al operario lesiones permanentes no invalidantes con limitación de la movilidad global de un dedo de la mano afectada superior al 50%, lo que le dio derecho a una indemnización de 750 euros. Esta resolución era administrativa.

Ahora la sentencia de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León da un giro a los derechos del trabajador y le reconoce la incapacidad parcial y la indemnización de algo más de 50.000 euros. Y es que el tribunal entiende que a la hora de valorar las lesiones a efectos de conceder una incapacidad, ha de tenerse en cuenta la actividad normal de la profesión que se realizaba con anterior al accidente y no la segunda actividad a la que fue destinado tras el mismo. 

El tribunal da por probado que el hombre sufre secuelkas de dolor crónico con irradiación a la extremidad superior hasta región cervical, pérdida de fuerza e inflamación con la sobrecarga que suponen evidentes limitaciones mayores que la mera pérdida de movilidad.