Muchos aragoneses intentan sortear la subida de impuestos de 2016
Los notarios han registrado una "gran afluencia" a sus despachos, sobre todo por donaciones y sucesiones, ya que se pierden las exenciones fiscales
Zaragoza
La subida de impuestos en Aragón que va a ser efectiva a partir de este viernes, 1 de enero, ha provocado que, este último día hábil del año en la administración pública haya largas filas desde primeras horas de la mañana en la oficina de Tributos de la calle Costa, en Zaragoza.
La subida de impuestos aprobada el pasado lunes por el ejecutivo aragonés ha hecho que cientos de zaragozanos apuren las últimas horas para tramitar algunos de ellos, principalmente transmisiones y donaciones. El malestar, por cierto, era evidente entre los que esperaban su turno.
Los notarios han registrado una "gran afluencia" a sus despachos, ha señalado Francisco Pizarro, decano del colegio de Notarios de Zaragoza, especialmente para el "otorgamiento de escrituras", que algunas se otorgan y otras no porque "ese cambio de impuestos exige, como en todos los casos, el adecuado asesoramiento para ver si merece la pena hacerlo", ha advertido. Las operaciones más numerosas están siendo las donaciones porque "a partir del año que viene, las bonificaciones y exenciones fiscales que había se pierden", seguida de las sucesiones, "que van a estar más gravadas".




