La CHD alerta de riesgo de desbordamiento en los ríos leoneses

León

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Las constantes lluvias de los últimos días han provocado que los cauces de los ríos de la provincia bajen especialmente crecidos. Tras un fin de semana de en el que los problemas se han concentrado en el curso alto de los cauces, la preocupación se traslada ahora a la parte baja y, especialmente, a los principales ríos como el Esla o el Órbigo a los que están llegando las crecidas de los afluentes. El Esla por ejemplo registra un caudal de más de 650 metros cúbicos por segundo a su paso por Benamariel con una tendencia al alza. De hecho la Confederación Hidrográfica del Duero espera que los principales picos en los cursos bajos se produzcan entre esta tarde y mañana, provocando crecidas de carácter moderado. Además del Esla la CHD estrecha la vigilancia sobre sus principales afluentes, como el Órbigo o el Cea. Este último se ha desbordado en localidades como Almanza donde ha quedado a apenas medio metro de la carretera. El alcalde Javier Santiago asegura que estos problemas vienen causados por la falta de limpieza de los cauces.

La misma queja llega desde Las Omañas donde el río que da nombre al municipio ha inundado parques y fincas. El alcalde pide a la CHD que tome medidas antes de que la situación se agrave con las sueltas del Pantano de Luna. Cada vez que abren las compuertas, dice Manuel Yebra, el cementerio de la localidad aqcaba convertido en una balsa de agua.

En León el Bernesga baja con un caudal superior a los 90 metros por segundo. Es cuatro veces superior al registrado el sábado, aunque se espera que la crecida remita en las próximas horas. El agua ha llegado ha quedado en algunos puntos al ras del paseo fluvial. En Bembibre la crecida del Boeza ha obligado a desalojar a un matrimonio y a sus dos hijos menores que han sido realojados en una vivienda de propiedad municipal