Desmantelan un laboratorio con mil plantas de marihuana
Hay tres personas detenidas de origen albanés
La Guardia Civil ha desarticulado un laboratorio de marihuana en una vivienda de Villanueva de Perales en la que se ha incautado de 1.038 plantas que arrojaron un peso total de 85 kilogramos. Según informa el instituto armado, los investigadores han detenido a tres personas de origen albanés de 20, 21 y 36 años de edad por su presunta implicación en un delito contra la salud pública.
En la vivienda registrada había numerosas lámparas de sodio para dar luz y calor, cantidad de diferentes fertilizantes y las plantas que se encontraban en distintas fases de crecimiento y cuyo valor en el mercado alcanzaría los 89.000 euros.
Las pesquisas comenzaron por el ruido molesto y el fuerte olor a marihuana que salía de la vivienda, lo que motivó que una patrulla hiciera varias visitas a la vivienda para entrevistarse con su morador sin tener respuesta alguna. Por ello, comenzaron una vigilancia discreta de la vivienda y detectaron movimientos de personas. El morador del inmueble solo abría la puerta a un varón de origen albanés que acudía con asiduidad a la vivienda en un vehículo y que resultó ser el cabecilla de la organización. El visitante mostraba una actitud vigilante e inquieta y solía salir con bolsas que dejaba en contenedores alejados o en su coche.
Según comprobaron los investigadores, la persona que se encontraba permanentemente en el interior del domicilio llevaba a cabo una labor de vigilancia y cultivo de la plantación. Por estos motivos, y con la oportuna autorización judicial, se procedió a la entrada y registro del inmueble y se desmanteló el laboratorio para el cultivo, elaboración y distribución de marihuana.
La vivienda la habían dividido en dos zonas, una utilizada para el cultivo y crecimiento de las plantas y la otra para el secado de la marihuana. Para ello, colocaron tabiques de pladur, una potente instalación eléctrica capaz de sostener aparatos climatizadores y bombillas de gran consumo y numerosos aparatos de aire acondicionado, humidificadores, ventiladores en el suelo, en techos y en paredes, e incluso un filtro de carbono en una ventana, para tratar de evitar el olor.
A los tres detenidos se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública por cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes y por defraudación de fluido eléctrico, puesto que tenían manipulado el contador de suministro de electricidad.