Las condiciones de la CUP
El nuevo gobierno catalán confirma que la Generalitat se va a retirar de siete causas judiciales por disturbios relacionados con los grupos antisistema. Y lo hará porque se lo exigió la CUP a cambio de permitir la investidura del nuevo president, aunque desde el ejecutivo se niega la mayor
Una imagen de los disturbios de Can Vies / Albert Gea (Reuters)
Barcelona
Era una de las condiciones que puso la CUP y ahora ha trascendido que el Govern se aparta de la causa contra 40 personas imputadas por los disturbios de la huelga general de 2012 o los que rodearon al desalojo del centro okupa Can Vies.
La causa va a seguir, pero solo con la fiscalía como acusación. De hecho, en Convergència justifican la decisión así: como ya está la fiscalía, no hace falta que también la Generalitat haga de acusación.
Según ERC la renuncia del gobierno catalán a pedir responsabilidades es una buena noticia. El partido de Oriol Junqueras considera que ni durante la huelga del 29 de mayo de 2012 ni en la crisis de Can Vies hubo violencia. El portavoz de los republicanos, Sergi Sabrià, no entra a valorar si el Ejecutivo de Artur Mas lo hizo bien o no personándose en estas causas, pero sí tiene claro que una vez analizadas al detalle, se ha hecho bien retirando la acusación: "son unos procesos judiciales muy concretos, en estos casos que no hubo ningún tipo de violencia y menos hacia los servicios de seguridad. Nos parece perfectamente explicable y la compartimos”
Desde Ciudadanos lo definen como una decisión muy grave, porque consideran que el pacto entre 'Juntos por sí' y la CUP no puede afectar en ningún caso al funcionamiento de la justicia, y mucho menos, dicen, si el resultado de todo ello es que se dejen de perseguir delitos