Más de mil pacientes de hepatitis C, tratados en Castilla La Mancha, con los nuevos medicamentos del Plan Nacional

Ciudad Real

En clave sanitaria, 1.100 pacientes de hepatitis C en Castilla La Mancha han recibido los tratamientos de última generación, en el último año, al amparo del Plan Nacional contra esta enfermedad infecciosa. La gran mayoría, unos 800 ya lo han culminado, viendo mejorar su calidad de vida según el SESCAM. Las plataformas de afectados se congregan precisamente este fin de semana en Madrid para evaluar resultados. Siguen demandando que se administre, desde el primer momento que el paciente es diagnósticado, algo que solo se produce en los casos más graves.

Tratamientos libres de Interferón que según el Jefe de Digestivo del Hospital Universitario, Dr. José Olmedo están alcanzado tasas de eficacia de más del 95 por ciento; es decir en la mayoría de los pacientes tratados, desaparece el virus. De los pacientes que están recibiendo estos tratamientos, la mayoría proceden de Ciudad Real ( 238)  seguida de Toledo (206), Guadalajara,(138) en Albacete (129) y en Cuenca (110).

Es una combinación de medicamentos, dependiendo del genotipo, que se administra gratuitamente en los hospitales, bajo un control riguroso, entre 12 y 24 semanas, indicado en un principio en los grados más avanzados como F2, F3 y F4. Tratamientos de alto coste para la sanidad que pueden oscilar, según las fuentes consultadas por la SER entre los 16.000 a los 35.000 euros. En tres meses, se aprecia la mejoría en una simple analítica.

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No es el caso de Jose Julián Fernández, portavoz de la plataforma de afectados en Puertollano, que después de tres meses, todavía no puede cantar victoria pero reconoce que está generando ilusión, porque en muchos casos se produce el milagro.

Descubrió hace 31 años que padecía hepatitis C, entonces se la denominaba no A no B y en su caso, fue contagiado por una transfusión de sangre en una operación, cuando estaba en el Ejército con 19 años.

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Las plataformas siguen demandando que el tratamiento se administre a todos por igual, que desde el primer momento que se detecte la enfermedad, el paciente pueda ser tratado, en los estados iniciales de la infección, algo que todavía no se está realizando salvo en algunas excepciones y llaman la atención de ofrecerlos también a los enfermos de las cárceles.

Recordemos que la hepatitis C, es una enfermedad infecciosa muy frecuente, se la conoce como la enfermedad silenciosa, afecta al 2 por ciento de la población Occidental y en los primeros años de incubación no se nota ninguna dolencia; de hecho muchas personas no saben que la padecen, hasta que no se realizan una analítica. Sólo en el área de Ciudad Real hay registrados 4000 pacientes, en la mitad de ellos la infección está activa, es decir se ha convertido en una enfermedad crónica, con las complicaciones que acarrea.