Culio: “Ante el Celta era el primer cambio y cuando vi que no entré me dije: Ya está, hasta aquí llegué"
Fue presentado, entre pitos, como nuevo jugador del Real Zaragoza
Las Palmas de Gran Canaria
Juan Emmanuel Culio fue presenta do ayer como nuevo jugador del Real Zaragoza entre pitidos, aunque se pudo explicar y pedirle perdón a su nueva afición por las palabras que dijo tras el ascenso a Primera con Las Palmas.
El medio argentino explicó en Cadena Ser Las Palmas que cuando decidió su marcha “se me pasaron muchas cosas por la cabeza y entendí que había cumplido un ciclo en la isla y espero hacerlo bien en otro gran club como es el Real Zaragoza. Tomé la decisión por un montón de factores y la mejor decisión era la de irme. Contento no estaba por no jugar más, y ese fue uno de los factores a la hora de irme. Lo hablé con el míster y me dijo que adelante y ahora mi objetivo es el de intentar subir con el Zaragoza”, detalló.
Y aclaró que tanto “el míster como el presidente querían que me quedara, pero fui yo el que me quise ir para que el entrenador y el club trabajen tranquilos”. Y todo cambió cuando se lesionó Ángel Montoro, porque según explicó “yo era el primer cambio y cuando vi que no entré entendí que el míster me quería proteger después de los pitos ante el Valencia y me dije: ya está, hasta aquí llegué. Es obvio que me condicionaron los silbidos porque esto es fútbol y todo lo que hice ya es pasado. A pesar de todo mi familia y yo pasamos año y medio muy lindo en la isla y me quiero quedar con una buena imagen”.
Semanas atrás “recibí la llamada de varios clubs, pero los rechacé a todos y la misma noche del partido ante el Celta tomé la decisión. Es verdad que lo venía analizando con mi familia, a la que me aferro mucho en mi familia; lo hablamos y llegamos a la conclusión que se había cumplido una etapa donde después de trece años sin ascender conseguimos darle una alegría a la afición amarilla. Nadie me puede reprochar nada porque hasta el último día me entrené a tope y nadie puede decir que me vieron de discoteca o bebiendo. Fue lo mejor para todos y no puedo reprocharle nada a nadie porque la vida continúa. Creo que me voy con la mejor de las felicidades porque el fútbol tiene estas cosas y no seré ni el primero ni el último al que le pitan; que se lo digan a Iker Casillas”, aunque no esconde que si le entristece un poco que “alguna parte de la afición no me reconozcan las cosas buenas que hice por el equipo”, sentenció.