"Salvo una trampa de los controladores, no volveré a dar positivo"

León

Como si nunca se hubiera ido, el huracán Sergio Sánchez está de vuelta. Dos años y algunos meses después de ser castigado por dar positivo en un control antidopaje, el atleta leonés regresó a la competición logrando el triunfo y la tercera mejor marca española del año en la Media Maratón de A Coruña (1h 04 min 22 seg).

El fondista gordonés quiere mirar hacia adelante, pero no sin antes insistir en que "se detectó una sustancia que, con conocimiento de causa, nunca he introducido. La Agencia Antidopaje aún no conoce qué sustancia introduje. En mi pasaporte biológico aparecen todos los controles menos en el que di positivo. Es un tema escabroso", afirmó en "León Deportivo".

Pero, ¿le pasará factura todo lo acontecido en los últimos tiempos?. Sánchez asegura que "salvo una trampa de los controladores, no volveré a dar positivo en mi vida". Sobre su deporte confiesa que "el atletismo está bajo sospecha y el que esté libre de pecado que tire la primera piedra". Sin personalizar, Sánchez considera que algún grupo de atletas "aprovecha las redes sociales para manifestarse contra el dopaje, Desde que existe la Agencia Española, algunos se han hecho entrenadores o corren a 30 o 40 segundos de sus marcas. Parece que les han sancionado de por vida".

Entre sus rutinas, además viajar puntualmente a Suiza por asuntos laborales, está el entrenamiento de alta competición. El estadio Hispánico es uno de sus retiros, allí donde cada día comparte pista con José Villacorta y sus atletas. Después de que nadie pudiera demostrar la implicación de Sánchez en el caso que salpicó al técnico y a dos de sus corredores de los que fueron exculpados, el de Ciñera solo pide "discrección cuando yo hago mis series. Pido estar solo en la pista, que nadie me vigile".