El presupuesto, en el aire

Zaragoza

No todo está escrito todavía en la negociación de los presupuestos del Ayuntamiento de Zaragoza. Las cuentas municipales han pasado hoy por la Comisión de Hacienda, un trámite previo al pleno extraordinario que debería aprobarlas inicialmente el próximo viernes. Y, a pesar de las negociaciones y los acuerdos de los últimos días entre Zaragoza en Común, el PSOE y Chunta Aragonesista, el acuerdo sigue en el aire por un punto en el orden del día de otra comisión previa, la de Personal, donde no se daba el visto bueno a la plantilla municipal.

El PSOE exigía que ese punto se retirara para ser discutido y negociado. Algo que no ocurría; y eso tensaba algo más la cuerda esta mañana. Javier Trívez, portavoz de Economía del PSOE, afirmaba que "ha habido una auténtica obcecación del consejero Cubero y, desde luego, no está en sintonía con lo que han sido sus maniobras, sus intentos de llegar a acuerdos". Trívez ha expresado que "querríamos saber, de cara al futuro, porque es lo que nos preocupa de cara al gobierno de la ciudad, a qué Zaragoza en Común tenemos que apoyar, censurar o soportar porque alguna, ciertamente, es de difícil soporte".

Plantilla y presupuesto, de la mano

¿Qué supone este aspecto? Presupuesto y plantilla van de la mano en el pleno del viernes y se votan conjuntamente, como explicaba el secretario de la comisión: "la plantilla es un documento anexo al presupuesto y en el pleno no procedería votación separada", por lo que "es una votación única sobre el conjunto de la documentación que conforma el presupuesto".

Hasta el viernes pueden negociar los grupos y llegar a un acuerdo en un punto que tiene mucho de pose de cara a la galería. La fricción está en 29 amortizaciones de plazas y creación de 32 nuevas, en el marco de una plantilla de más de 4.000 trabajadores municipales.

La tensión, por tanto, va a continuar unos días más, hasta el pleno del próximo viernes. De momento, la comisión de Hacienda ha aprobado enmiendas y transacciones que han movido unos 14 millones de euros, de un presupuesto de 701 millones.

Desde el equipo de gobierno, Fernando Rivarés mostraba su alegría contenida por unas cuentas que, reconoce, no son las mejores pero "el diálogo ha triunfado" que es "lo que soluciona cualquier conflicto y evita que aparezcan conflictos nuevos y por fin podrá haber un presupuesto que la ciudad se merece". No obstante "no es el mejor en opinión de ZeC" pero sí "un buen presupuesto dada la situación financiera del Ayuntamiento, la emergencia social y la circunstancia económica que nos atañe".

Y añadía que este presupuesto "no va a recortar nada, ningún servicio público esencial, se mantienen los servicios y se mejora su calidad" y el acuerdo "ha permitido que esté pensado y centrado en las personas", que era algo "fundamental".

Chunta esperaba otra actitud del gobierno en la negociación de las plantillas. Aún así, explicaba que las cuentas ya tienen "alma" y "rasmia", gracias, entre otras cosas, a sus enmiendas.

Críticas desde el PP y Ciudadanos

Los grupos de centro-derecha del salón de plenos, como es lógico, se mostraban más críticos. El PP ha expresado ya su voto negativo a las cuentas. Jorge Azcón argumentaba que "no sabemos cuánto dinero debe el Ayuntamiento de Zaragoza y, solamente por eso, no contarán con el voto del PP". Además, tildaba de espectáculo lamentable los convenios con entidades sociales. Y sobre impuestos, añadía que el PSOE "hace de bombero pirómano" porque "les han subido los impuestos a los zaragozanos y ahora vienen a decir que les quieren dar miseria para ayudarles" y señalaba que la estructura fiscal del consistorio se debe al PSOE.

Ciudadanos, por su parte, consideraba que las negociaciones entre Zaragoza en Común, PSOE y Chunta han sido "un teatrillo".