Días decisivos
El periodista Román Orozco reflexiona sobre los movimientos de los partidos políticos de cara a la conformación del próximo Gobierno de España
02:05
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/025RD010000000038990/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Ciudad Real
El futuro inmediato de este país se decide en los próximos días. Pronto sabremos si nuestros políticos están a la altura de su ciudadanía. Porque el 20 de diciembre, al no darle mayoría absoluta a ningún partido, el pueblo expresó un deseo imperativo: queremos un Gobierno de pacto y consenso. Dos meses después, los dirigentes de los principales partidos han sido incapaces de cerrar un acuerdo.
Cierto que unos han hecho más que otros. Empecemos por el Partido Popular, que es quien menos ha hecho. Ahí está el espectáculo lamentable del presidente en funciones, Mariano Rajoy, rechazando la oferta del rey para formar Gobierno. Ahora sabemos por qué: quería nuevas elecciones, como le decía el jueves a su colega británico, David Cameron.
Autodescartado el PP, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, aceptó el desafío. Un gesto loable que debe ser reconocido en las urnas. Pero casi imposible de culminar con éxito.
Si éste país fuera un país normal, en el que los políticos de distintos partidos son adversarios, pero no enemigos, hace días que podría haberse cerrado un pacto de gobierno entre los diferentes grupos de izquierda representados en el Congreso.
Pero la arrogante actitud de Podemos, de manera especial de su líder máximo, Pablo Iglesias, está entorpeciendo la formación de ese Gobierno de progreso del que tanto habla, pero por el que tan poco hace. La razón es clara: como Rajoy, desea que se repitan las elecciones, confiado en mejorar su posición y superar a los socialistas.
El grupo llamado a ser clave en ese Gobierno de izquierdas, que rectifique el camino hacia la desigualdad que ha marcado el PP en sus cuatro años de legislatura, ha presentado un “programa” de Gobierno inasumible en algunos aspectos por los socialistas. Desde Pedro Sánchez a García Page o Susana Díaz, los dirigentes del PSOE han dejado claro que no aceptarán un referéndum en Cataluña, porque va en contra de la Constitución. La dirección de Podemos es consciente de ello. Su intransigencia es palpable.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, es con Sánchez el dirigente que más ha trabajado para encontrar un punto de encuentro. Lástima que ese punto esté más cerca del PP, es decir de la derecha, que de la izquierda mayoritaria en el país.