De vuelta al cambio de hora

Gráfico del uso del tiempo por países / El País

A Coruña
Aquí estamos, de nuevo, cambio de hora incluido en un proceso que se repite cada año cada vez con más contestación social. Ni el argumento del ahorro energético sirve para justificar desfases de dos o tres horas sobre el horario más natural. En Galicia llegamos a ese momento en que la tarde se prolonga hasta las diez y debemos explicar a los más pequeños que, aunque es de día, es la hora de dormir. Hemos leído estos días numerosos informes medioambientales, económicos y epidemiológicos que explican que vivir al margen de los procesos naturales no beneficia a nadie. Y menos en este rincón occidental donde añadimos una hora al desfase general. Sabemos, además, que nuestro huso horario es un cambio impuesto en los años cuarenta, en plena Dictadura franquista, para acomodarnos a los tiempos de la Alemania nazi. No se entiende ese empecinamiento en mantener una organización claramente perjudicial a plena luz del día... y de la noche.
Por suerte sabemos que hay momentos en que se detiene el tiempo.
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